Pernoctaciones en la estación después de que el silo cerrara

Pertenencias de los temporeros de la aceituna se acumulan dentro de la sala

28 nov 2019 / 16:49 H.
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El Ayuntamiento abrió el silo, de manera provisional, entre el viernes y el domingo, ante el temporal de lluvia y frío. Desde el primer momento quedó claro que era una medida a la espera de la apertura de los albergues —el de El Coto comenzó a funcionar el lunes y el de la Avenida de Iberoamérica, ayer—.

Con el cierre del silo, la estación de autobuses vuelve a convertirse en refugio para inmigrantes temporeros, que se resguardan en las instalaciones y duermen, tanto en el interior como en el exterior. Además, en la sala de espera se acumulan equipajes y pertenencias de los subsaharianos. Es una situación similar a la de años anteriores. Según las fuentes, el lunes por la noche no se cerró la estación, ante la presencia de personas en el interior. Algunas de las personas que llegaron en busca de una oportunidad laboral en la campaña de la aceituna, prácticamente hacen vida allí y, en ocasiones, surgen disputas.

La recolección se generaliza a partir de hoy, una vez terminadas las jornadas de lluvias, que han dejado unos 180 litros por metro cuadrado desde que empezó el mes. A diferencia de otros lugares, la cosecha en Alcalá no es mala. Por ello han venido más temporeros foráneos. La desaparición de los cajeros de varias sucursales bancarias aumenta la demanda para dormir en los andenes de la estación de autobuses, edificio en el que, según una reciente licitación, habrá control.

Preguntada sobre la estación, la concejal de Servicios Sociales, Mercedes Linares, explica que el servicio de consigna para que se dejen las maletas estará abierto el 1 diciembre. La responsable recuerda la apertura del albergue de El Coto y de las instalaciones de la Avenida de Iberoamérica. “Y hay bastantes plazas por ocupar”, detalla Linares. Por su parte, el edil encargado de Seguridad Ciudadana, Jesús Aguilar, se refiere a la puesta en marcha ayer del albergue de Avenida de Iberoamérica, con capacidad para cincuenta plazas, “lo que absorbería buena parte de los que pernoctan en la calle”. En cuanto a la posibilidad de reabrir el silo, el popular apunta que las instalaciones se abrirían “de forma puntual ante situaciones de temporales de nieve y/o frío”.

La Junta otorgó al Ayuntamiento una subvención de 44.335 euros. El dinero se dedicará, a partes iguales, a acondicionar las viviendas turísticas de Las Cruces —alojamiento a partir de diciembre— y a equiparlas, incluso con videovigilancia. Además, la Consejería de Igualdad y Asuntos Sociales aporta una ayuda de 14.804 euros para contratar a un trabajador social.

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