Las fiestas de Villalobos “se salen”
Cientos de personas en la comida de la aldea, que tiene un puñado de vecinos
Dentro de un panorama general, de creciente despoblamiento de las aldeas y de declive de muchas de sus fiestas, las celebraciones en honor de la Virgen de Fátima, celebradas en Villalobos consiguieron reunir a cientos de personas, a pesar de que en el núcleo y sus cortijos apenas queda un puñado de vecinos. Uno de los secretos fue la implicación de los hermanos organizadores de este año, Juan Aguilera y Juan Domingo Cano. Según este último, en la comida llegó a haber unas cuatrocientas personas. Los contenidos también incluyeron, una misa, una procesión y una verbena, el primer día, y, el segundo, una comida de convivencia amenizada por un conjunto y juegos populares.