100 metros de roscón de Reyes solidario, este domingo, en Jódar

Este domingo, a las cinco de la tarde, la plaza del Ayuntamiento de Jódar será testigo de una tradición que une sabor y generosidad: un gigantesco roscón de Reyes solidario. Es la sexta edición de esta iniciativa organizada por la Asociación de Apoyo al Pueblo Saharaui de Jaén, con la que colaboran este periódico y el Ayuntamiento de este municipio enclavado en Sierra Mágina.

Los asistentes podrán deleitarse con uno de los platos más emblemáticos de estas fiestas navideñas en España, un roscón que no solo destacará por su sabor, sino también por su imponente tamaño: 100 metros de longitud que promete endulzar el espíritu y el corazón de todos los presentes.

La iniciativa no solo busca endulzar el paladar de vecinos y asistentes, sino que también recaudar beneficios para el proyecto “Vacaciones en paz”. “Es uno de nuestros proyectos más visibles. Alrededor de sesenta niños saharauis vienen a pasar el verano en acogida vacaciones. Sin embargo, cuesta bastante dinero, ya que los vuelos vienen directamente desde la ciudad más cercana a los campos de refugiados”, sostiene Franma Ruiz, presidenta de la entidad organizadora. Lo obtenido por la venta de cada porción, a un euro, irá destinado a esta iniciativa.

El suculento postre será elaborado, como en las últimas cuatro ediciones, por la Panadería Benítez, un negocio familiar levantado con el esfuerzo de cinco generaciones de trabajo desde 1860. María Benítez De la Torre, una de sus propietarias, asegura que no dudaron en participar desde que se lo ofrecieron por la “gran aceptación y atención” del evento.

Desde ayer, el establecimiento funciona a pleno rendimiento para elaborar el inmenso roscón que se podrá degustar el domingo. Con su característico relleno de nata y frutas decorativas, tiene una elaboración única y titánica: brazos de 50 a 60 centímetros que se unen hasta formar esta monumental creación. Un esfuerzo que involucra a un equipo de seis personas trabajando durante dos días para que todo esté perfecto. “La masa es la misma y con la misma elaboración de los roscones de nuestra panadería. La diferencia es que, en vez de ir en forma de rosco, lo colocamos en bandejas alargadas”, subraya Benítez.

La gente de Jódar se vuelca por completo con el evento, prueba de ello es que esta no sea su primera edición ni tenga intención de ser la última. “Esperamos que haya más y que estemos ahí para verlo, iniciativas como estas son las que hacen falta”, comparte Benítez.

“El roscón tiene mucha acogida, la gente sale a ver la cabalgata y se consume solo”, sostiene Ruiz, quien espera que se lleguen a recaudar cerca de mil euros. Aunque, esta no será la única iniciativa que se realice a lo largo del año. Aún quedan muchas otras con las que ayudar a decenas de pequeños saharauis a pasar unos meses alejados de su dura realidad.