Un retrato generacional de los años 90 a través del cine

Zaragoza vive estos días el rodaje de la película Las niñas, la ópera prima de la directora Pilar Palomero, que cuenta con la linarense Natalia de Molina como una de sus protagonistas principales. La actriz interpreta a la madre de la pequeña Celia, una joven que se enfrenta al despertar de la adolescencia, el comienzo de la madurez y la vida real en una época que no era nada fácil para las mujeres. Los años 90 centran el tiempo en el que está enmarcada la historia que cuenta este proyecto audiovisual. Así, Las niñas, refleja el retrato generacional de unas chicas que en esos años vivían entre ataduras y contradicciones con motivo de lo que aprendían e inculcaban tanto en el colegio como en casa. Para Celia, la niña protagonista, llegar a los once años será un cambio de 180 grados. La joven estudia en un colegio de monjas de Zaragoza y vive con su madre. Sin embargo, cuando llega a clase una nueva compañera, Brisa, descubre con sus propios ojos otra realidad.

Una en la que la sociedad vivía entre contrastes, con mensajes distintos para los niños y para las niñas. A través de Brisa, Celia conocerá otros puntos de vista y descubre otra etapa nueva con la pubertad. Es entonces cuando Celia empieza a tener nuevas experiencias, sale de su casa y descubre la ciudad gracias a un grupo de chicas mayores que ella y se cuestiona todo lo que la rodea.

“He querido retratar la educación de las mujeres de hoy en día, a través de las vivencias que tuvieron en las escuelas en los años noventa, específicamente en la España del 92, que estaba dividida entre dos tierras: un país que quería ser moderno, pero todavía era muy conservador y tradicional”, señaló la directora a Europa Press de multipremiados cortometrajes como La noche de todas las cosas o Zimsko Sunce. En este sentido, indicó que la película es “una mirada hacia lo contradictorio de crecer en un ambiente que busca una apertura, pero con valores anticuados”. “No sé si ha cambiado esta situación en la España actual, pero en ese momento recibimos una educación muy conservadora, es decir que al tiempo que la mujer ya estaba insertada en el mundo laboral, había una visión de la mujer muy sexualizada y cosificada”, agregó la directora de la película. Al respecto, admitió que la cinta “tiene algo de autobiográfica” porque incluye “momentos y vivencias” relacionadas a la adolescencia de la cineasta. Es por ello que, a su juicio, “muchas mujeres se sentirán representadas”.

Por tanto, la película supone un despertar en todos los niveles para la joven protagonista, quien no solo se enfrentará a la pubertad y a la adolescencia, sino que también tendrá un despertar en todo lo referente a la moral y el pensamiento crítico, algo que, por lo general, aparece en esta etapa de la vida, cuando se abandona la infancia y la inmadurez.

Por su parte, la actriz linarense señala que una vez vio el guión no tuvo dudas con respecto al proyecto, puesto que llegó a sentirse reflejada con el papel de la joven Celia. De hecho, una de las razones es que ella vivió esa etapa en los años 90 y, al grabar esta película ha llegado a plantearse cosas que hasta el momento ni siquiera se había planteado, lo cual fue uno de los motivos primordiales para la artista a la hora de confirmar su participación.

Seis son las semanas en las que Natalia de Molina y la joven Celia, interpretada por la debutante en el mundo del cine Andrea Fandos, junto a otro grupos de actrices noveles que se embarcan en este proyecto que trata de hacer ver la realidad de una época en la que la juventud, y sobre todo femenina, no lo tuvo nada fácil con la educación anquilosada que, en cierta manera, aun perduraba en las casas y los colegios de los primeros años 90. Sin embargo, aunque el rodaje de la película tenga lugar durante estas semanas veraniegas, no será hasta el año que viene cuando se pueda comprobar el resultado final del proyecto en el que la ganadora de dos goyas ha decidido participar tras formar parte de otros filmes como Quién te cantará, Elisa y Marcela o Animales sin collar.