Pablo Sánchez se asoma al Olimpo de las estrellas

El base linarense de 16 años fue convocado con el Unicaja para el partido europeo con el Kazan

25 oct 2018 / 12:51 H.

Su proyección es destacada pese a que solo tiene 16 años y da sus primeros pasos en la categoría júnior. Pablo Sánchez Infantes vivió un mes de agosto para el recuerdo al conseguir la medalla de plata en el Campeonato de Europa con la selección española de su categoría, liderada por el madridista Usman Garuba en Serbia. Ahora, el linarense da un salto al entrenarse con la primera plantilla del Unicaja, debido a la lesión de Alberto Díaz, y al ser convocado para el encuentro de la Euroliga frente al Unics Kazan de Rusia, aunque el técnico Luis Casimiro no lo alineó debido al marcador tan ajustado. Los malagueños se impusieron por solo dos puntos (82-80) después de remontar el marcador. El base, formado en el CB Linares y en el CAB, vivió momentos intensos que empezaron con el calentamiento en el Pabellón José María Martín Carpena. Pablo Sánchez ya participó en lunes en la sesión de entrenamiento previa al compromiso europeo. Casimiro quiere comprobar su evolución, ya que Alberto Díaz estará un tiempo de baja, y no se descarta, si lo convoca en otra ocasión, su debut en la Liga ACB. El base, que fue fichado por el Unicaja después de maravillar con el CAB Linares en el Campeonato de España infantil, cumple su tercera temporada en el club de la Costa del Sol. Este año juega en el equipo de la Liga EBA que entrena Germán Gabriel con un promedio de 24 minutos en pista, 9,3 puntos, 2,7 rebotes y 1,7 asistencias. El Unicaja es un referente en el trabajo con la cantera y en el punto de mira del cuadro técnico están igualmente Alessandro Scariolo, hijo del seleccionador absoluto de baloncesto, Lucas Muñoz y Javi Rodríguez, todos compañeros de equipo de Pablo Sánchez, y que fueron llamados en sesiones de entrenamiento de pretemporada y en las ventanas de los compromisos de los combinados nacionales.

Pablo Sánchez fue titular en el Europeo y jugó los 7 partidos de la competición, con una media en la pista de 16 minutos. En la semifinal con Turquía fue alineado 33 minutos, el encuentro con más protagonismo en tierras serbias. El base logró 16 puntos (2,3 por compromiso), 20 rebotes (2,9) y 21 asistencias (3). El jugador está encantado con la experiencia vivida y su teléfono no paró de recibir mensajes de felicitaciones por la medalla de plata conseguida.