Más ataques a la ganadería

COAG pedirá a las administraciones que actúen para evitar nuevas muertes

18 abr 2018 / 10:21 H.

Sensación de “impotencia” e “indefensión” es lo que denuncian los ganaderos del sector ovino y caprino en la provincia. ¿El motivo? Que la cifra de ataques a sus respectivos rebaños, por parte de perros sueltos, va en aumento. Una situación que lamentan, ya no solo por las pérdidas económicas que ello supone, sino por la problemática que este tipo de sucesos acarrea para la labor del día a día. Y es que, en lo que va de año, se perdieron más de 500 ovejas en varias comarcas, como Sierra Morena y Mágina, donde la actividad ganadera extensiva cobra fuerza, ahora, por la trashumancia.

Por esta razón, COAG Jaén da la voz de alerta para evitar la muerte de más cabezas de ganado. No en vano, exigirá a las diferentes administraciones que tomen cartas en el asunto y ofrezcan “soluciones”. También que se ejecuten más controles por el bien de los profesionales del sector y de su recurso más preciado, los animales. Así lo confirmó el secretario general de la organización ganadera, Juan Luis Ávila: “Los ataques sufridos son cada vez más frecuentes y vienen provocados por perros abandonados o bien por perros de caza que se quedan sueltos por el monte tras alguna batida. Esto ya está colmando la paciencia de los ganaderos y no puede ir a más”, dijo.

Con el fin de que se escuchen las reivindicaciones, desde COAG ya se ha solicitado un encuentro formal con la Subdelegación del Gobierno central para trasladar la problemática. Además, la organización recurrirá a otras instancias, como el Seprona y la Junta de Andalucía, para aunar esfuerzos que ayuden a acabar con la situación.

“Ya hablamos incluso de indefensión porque, hace unos días, me contaba un ganadero que los perros intentaron atacarle a él cuando fue a comprobar el estado de sus animales. Pedimos que se controle más a los perros sueltos y se introduzca un protocolo de actuación con ellos”, agregó Ávila. Al hilo de esto, el secretario general de COAG Jaén dejó entrever el agravio comparativo que se da con respecto a los perros que usan los ganaderos para controlar el ganado en sus explotaciones. “En este caso, los ganaderos sí tienen que tener los animales bien identificados y son perseguidos, sin embargo, los perros que atacan ni siquiera tienen identificación”, expuso.

Por su parte, el responsable de Ganadería de COAG Jaén, Antonio Punzano, lamentó las pérdidas que esta situación trae para el sector. “No se trata ya de pérdida económica únicamente por el valor individual de cada oveja. Debemos tener en cuenta que con la muerte de cada ejemplar se pierde también el que pueda continuar la cría de los corderos y que las hembras sigan la reproducción. Además, las imágenes que los propios ganaderos se encuentran cada día son lamentables. Genera mucho malestar el regresar a casa y no saber lo que uno se puede encontrar al día siguiente”, manifestó el ganadero.

al problema se suman los robos del ganado

Los cada vez más frecuentes ataques al ganado no son la única problemática denunciada por el colectivo de ganaderos en la provincia jiennense. A ello se suman también, según señaló la organización COAG Jaén, los “numerosos robos de ejemplares mientras que las investigaciones siguen sin aportar resultado alguno”. De ahí que pidan a las autoridades un control exhaustivo.