Los cristianos se toman la revancha

Vívida y multitudinaria recreación de un asalto de las tropas del reino nazarí

14 jul 2019 / 11:40 H.

Una multitud disfrutó de la jornada principal de las XIV Fiestas Calatravas. El protagonismo correspondió al asalto de la villa de Alcaudete, recreación de un episodio, recogido a través de una leyenda, basado en el intento de tropas nazaríes de capturar la preciada fortaleza fronteriza

Después de un brillante pasacalle, en el que se implicaron las asociaciones de Escuadras Moras y Cristianas de Alcaudete, de Nazaríes Cardyra, Imperium, Milia Regis, la Banda Municipal, la Agrupación Musical de San Juan y San Elías, Nuestro Padre Jesús Cautivo y Nuestro Padre Jesús Nazareno y el colectivo granadino Charanga de Íllora, la comitiva llegó a la Plaza 28 de Febrero, donde, ante una muchedumbre, se desató todo el esplendor de la fiesta.

Por tercer año se representaron las peripecias del intento de tomar Alcaudete por parte de las tropas andalusíes granadina. En el montaje tuvieron protagonismo especial más de cien recreadores. Se trataba d elos soldados calatravos de “Militia Regis”, los campesinos de “Imperium” y los nazaríes. Después de que los granadinos pidieran la rendición y de un duelo entre un castellano y un hispanoárabe, en la que el primero pierde, pero aún así no se respeta el pacto de dejar que penetren los nazaríes, empieza una invectiva con arietes en el que los mahometanos llegan a romper la puerta de acceso. Sin embargo, la figura de Salvaora, con una encendida arenga hace que los labriegos se envalentonen e impidan la conquista. Tras la llegada de las tropas calatravas, los granadinos se baten en retirada. La espectacularidad y la emoción a flor de piel fueron los rasgos definitorios de una escenificación en la que se cuidó hasta el último detalle. La recreación es una de las bases para la declaración como Acontecimiento Turístico Andaluz.

El final de la refriega supuso la apertura del recinto situado en el entorno del Castillo Calatravo, con un mercado de artesanía y puestos de comida y bebida. Destacaban las tabernas calatravas de Nuestro Padres Jesús en el Huerto, San Juan y San Elías, Santa Verónica, Nuestro Padre jesús de la Humildad y el Club Veterano. La velada contó con la animación de músicos, trovadores, bufones y espectáculos circenses. La diversión se prolongó, en una velada con temperaturas agradables, hasta bien entrada la madrugada.

Hoy, última jornada de la fiesta, la actividad vuelve, a partir de las diez y cuarto de la noche, al palenque de las Caballerizas Reales, con el juicio divino contra un caballero calatravo acusado de un comportameinto traidor.