El portátil de un pederasta en la tienda de segunda mano
La Policía investiga los 6.500 archivos pedófilos hallados en un ordenador llevado a un negocio de objetos usados
La Policía Nacional investiga el hallazgo de más de 6.500 archivos pedófilos localizados en un ordenador que fue llevado a un establecimiento de compra y venta de objetos de segunda mano de la capital jiennense. El material, que estaba almacenado en un disco duro de gran capacidad, fue localizado por el personal del negocio cuando se dispuso a acondicionar el portátil para su puesta a la venta. Al parecer, y según las primeras indagaciones, pertenece a una persona fallecida y fueron sus familiares los que llevaron el aparato a la tienda. Así lo han hecho constar los agentes de la Unidad de Delincuencia Especializada y Fiscal (UDEF) de Jaén en un informe remitido al Juzgado de Instrucción número 3 de Jaén, que dirige las diligencias abiertas. No obstante, la investigación judicial no se da todavía por concluida.
Las pesquisas comenzaron a finales del pasado año, cuando el propietario del negocio presentó la denuncia en la Comisaría. Lo hizo después de revisar el contenido del ordenador portátil que un cliente le había llevado días antes para su posterior venta. Fue en ese proceso cuando encontró los 6.735 archivos (fotografías y vídeos) de menores en actitudes sexuales. Los agentes realizaron un clonado del disco duro para su análisis. Efectivamente, comprobaron la existencia del material pedófilo y que podría tratarse de un delito de corrupción de menores. Así que comenzaron las indagaciones. A través de la documentación aportada al negocio, la Policía Nacional localizó a la persona que llevó el aparato a la tienda. Explicó que el portátil perteneció a un familiar que había muerto un tiempo atrás. Añadió que la pareja del fallecido, que es de nacionalidad extranjera, se marchó posteriormente a su país natal. Así que recogieron los objetos que había en el domicilio para tratar de venderlos en establecimientos de segunda mano. Uno de esos aparatos fue el portátil con los archivos pedófilos. La Policía da por concluida las pesquisas, a la espera de que el juez Miguel Sánchez-Gasca decida archivar la causa.
En el año 2010, se produjeron unos hechos similares en la capital jiennense. Un vecino de Jaén, aunque de origen ecuatoriano, fue detenido después de que el informático, al que llevó su ordenador para que fuera reparado, descubriese que el disco duro contenía decenas de archivos porno infantil. Además, el arrestado compartía el material con otros ciberpederastas.