Constructores temen por el futuro de la Estación Intermodal

La Asociación de Constructores y Promotores de Jaén, que preside Francisco Chamorro, está desolada por el fallo del Tribunal Superior de Justicia de Andalucía que echa por tierra el Plan General de Ordenación Urbana (PGOU), un documento clave, como recuerdan, para la construcción de infraestructuras que se consideran “vitales” para el desarrollo de la ciudad, como la Estación Intermodal, que se plantea para unificar las de tren y autobuses en Vaciacostales, y la Ciudad Sanitaria. “Esperábamos algún dictamen desfavorable, pero esto es una barbaridad, nos retrotrae al PGOU de 1996 y supone una noticia muy mala para los inversores”, reflexiona el presidente de la patronal, convencido de que la decisión de la Justicia deja poco margen de maniobra. “Aunque la Junta apele en casación ante el Tribunal Supremo, la resolución puede llevar años”, apunta. Como hicieron Ecologistas en Acción, que también recurrió el PGOU jiennense, habla del precedente de Marbella, con un plan urbanístico que es papel mojado, y recuerda que son muchísimas las complicaciones que genera esta situación en la ciudad costasoleña.

Francisco Chamorro apunta que en el proyecto urbanístico jiennense se recogen 16 convenios, con inversores privados, que, con el varapalo de los tribunales, peligran. Entre ellos, como cita, la construcción de una bolera en Maristas; la ampliación del cementerio; un residencial en la Carretera de Córdoba y viviendas en el Bulevar y en La Glorieta. “El sector tenía esperanza en poder ejecutarlos. Si no prosperan, las administraciones tendrán que hacer frente a las compensaciones por la pérdida de estas inversiones”, argumenta. En cuanto a las complicaciones a corto plazo, el responsable de la asociación desconoce saber la magnitud real de la sentencia en aquellas obras que ya están en marcha, entre ellas, la del gran centro comercial denominado Jaén Plaza, en Las Lagunillas, cuyos promotores trabajan con la previsión de que los primeros negocios abran sus puertas a finales de este año. Este periódico trató, sin éxito, de conocer la versión del Grupo Alvores, que está detrás de este complejo de ocio y comercial al respecto.

“Estamos esperando una comunicación oficial del Ayuntamiento, redactor del PGOU, y de la Consejería de Medio Ambiente, que le dio el visto bueno. Alguien tiene que asumir responsabilidades, porque han sido doce años para la aprobación del plan. Creo que los ciudadanos no se dan cuenta de la gravedad de que, finalmente, el documento no pueda salir adelante”, deja claro.