Adjudicación de los últimos cuatro huertos municipales

Cuatro vecinos de La Carolina recibieron de manos de la alcaldesa, Yolanda Reche, las llaves de los últimos huertos sociales que quedaban disponibles. En el acto estuvo también presente el concejal responsable del área de Servicios, Andrés Cuadra.

Una vez terminado el proceso de adjudicación, los beneficiarios podrán disponer de la parcela durante cuatro años, siempre que superen los dos meses de prueba. Durante este tiempo, los “nuevos agricultores” tendrán a su disposición de una parcela de cincuenta metros cuadrados para cultivar sus propios alimentos de una manera ecológica, al mismo tiempo que se fomenta el estilo de vida saludable. Tal y como explicó la alcaldesa, en el salón de plenos, lo recogido de su labor no podrá ser puesto a la venta al público, sino que se destinará en su totalidad para el auto consumo.

“Con los huertos sociales lo que buscamos es que los propios vecinos recuperen las labores agrarias al producir frutas y hortalizas con una calidad máxima y libre de residuos. Esa es la esencia de una iniciativa que debería ampliarse”, señaló la responsable.

En concreto, el Ayuntamiento es propietario de una parcela de terreno con una superficie total de 4.643 metros cuadrados. Se encuentra situada en calle Flandes sin número del polígono Industrial La Aquisgrana. El suelo se dividió en veintidós huertos, cuya superficie es de cincuenta metros cuadrados cada uno. De ellos ya se encuentran adjudicados los cuatro últimos que se corresponden con las parcelas con los números 8, 13, 15 y 22. Entre los requisitos para optar a uno de los huertos se halla ser mayor de edad, figurar en el padrón con una antigüedad de al menos dos años y encontrarse con capacidad, física y psíquica, para la realización de las labores agrícolas a desarrollar en el huerto de ocio. Se han quedado en lista de espera cuatro personas. Con la reciente concesión, culmina una iniciativa que surgió con el objetivo de sacar el máximo provecho social a un bien del Ayuntamiento. Por otro lado, sirve para potenciar la agricultura sostenible y el auto consumo de verduras y hortalizas. Las parcelas se encuentran dotadas de agua para facilitar el cultivo. Los huertos sociales también representan una fórmula para potenciar la convivencia entre las personas que los cuidan y que dedican una parte de su tiempo de ocio a una actividad gratificante en contacto con la naturaleza.