La provincia jiennense tiene una situación geográfica envidiable, siendo un punto clave en la conexión entre el Levante español y la comunidad autónoma andaluza. Asimismo, la Andalucía Oriental pasa obligatoriamente por la provincia, y la logística de transportes debería tener en la tierra del mar de olivos un punto neurálgico para la conexión empresarial. Sin embargo, la realidad se aleja de esta situación ideal, en gran parte por culpa de las diferentes deficiencias que nos encontramos en la red viaria provincial, y en su conexión con los territorios colindantes a ella. Es, por tanto, fundamental trabajar en los diferentes ejes neurálgicos a fin de mejorar estas conexiones. Obras, algunas, ya en proyecto, y otras que se quedan en meras promesas aún por cumplir.
La conexión con Albacete es la que más avanza
La conexión con el levante español sigue siendo uno de los grandes objetivos de la provincia. Concretamente, se trata del proyecto de la A-32, que unirá a la provincia de Jaén con la de Albacete en un proyecto que lleva años anunciándose. Esta autovía que llega desde Jaén, a Linares, pasando por Úbeda y Villacarrillo, acaba de formalizar los contratos de trazado y construcción de los nuevos tramos de la autovía entre Villanueva del Arzobispo y Beas de Segura y Beas de Segura Arroyo del Ojanco. tendrán una longitud de más de 20 kilómetros y darán continuidad hacia la provincia de Albacete a los casi 31 kilómetros que se pusieron en servicio en el año 2022, en concreto, entre Torreperogil y Villanueva del Arzobispo. Es uno de los proyectos donde más pasos se han dado en los últimos años, siendo un eje fundamental de comunicación entre la comunidad andaluza y Castilla la Mancha.
La autovía con Córdoba sigue siendo una quimera
Jaén y Córdoba son las únicas provincias andaluzas que no están conectadas de forma directa por autovía. Es una de las mayores demandas del comercio y la logística, ya que la A-306, que sirve de enlace de Torredonjimeno con el municipio de El Carpio, no satisface las necesidades de una vía en con un tráfico denso y un constante flujo de transporte pesado entre una provincia y otra. Fue una de las promesas del Gobierno de Juanma Moreno y, sin embargo, hasta ahora tan solo se ha acometido una inversión para 25 vías de servicio paralelas a la carretera, una glorieta y un tercer carril de 2 kilómetros para vehículos lentos. Nada que se parezca a la autovía demandada, lo que algunos han calificado de “parche”.
Autovía del Olivar, muy poco a poco
La Autovía del Olivar es una autovía autonómica andaluza que unirá la ciudad de Úbeda con el municipio sevillano de Estepa, discurriendo por donde ahora lo hacen las carreteras autonómicas A-318 (Estepa - N-432) y A-316 (Úbeda - N-432). Actualmente se encuentra en servicio los tramos situados entre Úbeda y Martos, el resto de tramos están en fase de proyecto o pendientes de licitación, en lo correspondiente a la provincia de Córdoba y Sevilla, salvo el tramo entre las localidades cordobesas de Lucena y Cabra. Una vía cuya conexión completa se encuentra paralizada, a pesar de las muchas voces que piden su finalización.
Inversión para mejorar la conexión entre Jaén y Andújar
La que más dinero ha recibido desde la llegada de Juanma Moreno a la Presidencia del Gobierno autonómico ha sido la A-311, carretera de la red intercomarcal que une Andújar con la capital y que, en su totalidad, culebrea por suelo de la provincia. Esta vía fija el inicio de su discurrir en la rotonda del enlace 54 de la Autovía del Olivar, sentido Baeza, en el norte de la ciudad capitalina, y finaliza en el enlace 323 de la A-4 sentido Madrid, con el cruce de la travesía Madrid- Cádiz, al sur de Andújar. A lo largo de su recorrido, la A-311 discurre por núcleos de población tales como Lahiguera, la aldea Cañada de Zafra y Fuerte del Rey.
Prioridades en la mejora de la vertebración provincial
La A-315 y la A-322 son carreteras catalogadas dentro de la Red Básica Intercomarcal de la Red de Carreteras de Andalucía, en la provincia de Jaén. La carretera A-315 tiene su inicio en la localidad de Torreperogil (intersección con la N-322) y finaliza, para su recorrido dentro de la provincia de Jaén, en el límite provincial con Granada, dentro del término municipal de Pozo Alcón, con una longitud de 74 kilómetros. Por otro lado, la carretera A-322 conecta los municipios de Jódar y Cazorla con una longitud de unos 44 kilómetros. Estas carreteras cuentan con una Intensidad Media Diaria que dependiendo de los tramos oscila entre los 654 y 4.274 vehículos, por lo que su mejora es una prioridad para vertebrar una parte importante de la provincia.
Inversiones necesarias y cumplidas
Además, el Ejecutivo autonómico tiene a punto la adjudicación de la construcción del nuevo puente del Aguadero, en la A-317, tercera carretera jiennense en volumen de inversión, según los datos facilitados por el propio Gobierno de la Junta de Andalucía. En su conjunto, la A-317 ha recibido 7.925.219,03 euros desde que Juanma Moreno es presidente de la comunidad autónoma. Parte de ese dinero se invertirá en la mejora del trazado de un tramo de 1.024 metros situado entre los puntos kilométricos 3 y 4 y que discurre sobre los cauces de los ríos Orcera y Trujala y en paralelo al río Hornos. Es la presencia de estos ríos lo que condiciona de manera importante el trazado, con lo que se levantarán dos nuevas estructuras: una de 32 metros para el paso sobre el río Orcera y otra de 120 para superar el escollo del río Trujala.
Los 7 puntos negros de las carreteras jiennenses
1.) N-323a, entre los kilómetros 1 al 21
2.) N-432a, en el kilómetro 382
3.) N-4a, entre los kilómetros 249 al 253
4.) N-322, en el kilómetro 202
5.) A-4 entre los kilómetros 256 y 257
6.) N-432 entre los kilómetros 388 a 399
7.) A-316 en el kilómetro 3,5