... Y quinientas noches

Un año se cumple del rechazo de la candidatura jiennense a albergar la base logística del Ejército de Tierra y, doce meses después, “Jaén Merece Más” se queda solo en la batalla social

07 feb 2022 / 16:45 H.

No son exactamente las quinientas noches que dice la letra de la canción de Joaquín Sabina, pero sirva el símil para hablar del tiempo transcurrido desde aquel día que Jaén, incluida provincia, vivió un antes y un después con el cerrojazo a la esperanza que supuso el sueño de la base logística del Ejército de Tierra. Un año se cumple de aquella declaración de la entonces vicepresidenta del Gobierno, Carmen Calvo, mediante la que prendió la mecha de la indignación de un pueblo, entendido como sociedad, aletargado ante el paso de trenes en forma de oportunidades que se las lleva el viento. Un año del “no” por respuesta a un proyecto que consiguió unir todas las ideologías políticas con la finalidad de lograr un revulsivo económico para esta tierra. Un año de propósitos y despropósitos en los que quedan todavía capítulos por escribir, por más que haya quienes intenten cerrar la historia en falso por miedo al espectáculo.

El Plan de Concentración de Órganos Logísticos Centrales del Ejército, Colce, está escrito en legislaciones y programas gubernamentales desde hace décadas, pero nadie conoció su existencia hasta que a alguien se le ocurrió sacarlo del cajón del olvido. Al César lo que es del César, fue la concejala María Cantos, entonces al frente de Ciudadanos en el Ayuntamiento de Jaén, quien emprendió una batalla política y social para que la capital pudiera entrar como candidata para albergar un proyecto llamado a crear cerca de dos mil puestos de trabajo directos. La ruta por administraciones públicas y colectivos terminó, incluso, en declaraciones institucionales de respaldo y en un “sí” rotundo a una instalación militar con beneficios laborales para toda la provincia. Toledo y Jaén eran las aspirantes al Plan Colce en la recta final de una carrera en la que, sin saber si participaba o no, sacó ventaja Córdoba hasta llegar a la meta en un pestañeo.

Las dudas sobre un proceso administrativo en el que Jaén tenía todas las de ganar, por razones de peso como su posicionamiento geográfico, el consenso, la disponibilidad de terrenos y la solución financiera, quedaron sembradas con las poco acertadas declaraciones políticas de la entonces ministra de raíces cordobesas y abonadas con la sinceridad escenificada por el alcalde de Jaén, Julio Millán, en la que dejó claro que la secretaria de Estado de Defensa, Esperanza Casteleiro, le prometió unos día antes que el proyecto era para Jaén.

Fue entonces cuando entró en escena la plataforma ciudadana Jaén Merece Más. El colectivo cogió la bandera de la indignación jiennense y programó una caravana, en el día de San Valentín, en la que se notó el amor por Jaén. Tan grande fue aquella jornada que todas las asociaciones de la provincia se unieron en otra gran manifestación el 7 de marzo, con ruido de motores hasta Despeñaperros que terminó con incomprensibles multas por incumplimiento de las normas de tráfico en una protesta pacífica y ejemplar en España. Hay que hacer un esfuerzo de síntesis para continuar con todo lo ocurrido desde aquel 4 de febrero de 2021. La dimisión de tres de los cuatro concejales de Ciudadanos del equipo de Gobierno en el Ayuntamiento de Jaén tuvo como principal detonante el Plan Colce, fundamentalmente ante la pasividad del resto de gobernantes que, después del zapatazo, invitaron a ministros a un paseo por Jaén sin más leña que la que arde. Y, desde entonces, los únicos que siguen en la escena de la lucha son quienes cogieron la batuta de la indignación. “Jaén Merece Más” denunció penalmente el proceso de selección por supuesta prevaricación administrativa y se quedó solo en una guerra sin cuartel por sus pretensiones políticas convertidas en mucho más que una amenaza. Así está la “cosa” un año después.

Candidatos del Partido Popular tras las elecciones de Castilla y León

No hay “fumata blanca” para que el Partido Popular pueda desvelar quién será candidato a la Alcaldía de Jaén. La dirección provincial tiene claro el nombre y los apellidos del elegido para enfrentarse en las urnas al actual equipo de Gobierno, conformado por el Partido Socialista y el respaldo de la única concejal de Ciudadanos, porque hay que recordar que tres dimitieron y pasaron, por orden de su partido, al grupo de los no adscritos. Sin embargo, la orden de Génova es esperar a que pase el ciclón electoral de Castilla y León. El presidente provincial, Erik Domínguez, quiere darlo a conocer lo antes posible para ganar tiempo con vistas a una cita municipal precedida por otra autonómica. La decisión está tomada y, a falta de la bendición de las direcciones nacional y regional, solo queda la espera que desespera. Hay que tener en cuenta que corren nuevos tiempos para un partido que aspira a gobernar en la capital y, sobre todo, en la Diputación Provincial de Jaén. La unidad es la clave de un camino que marca la diferencia con equipos anteriores, al menos de cara a la galería, porque ya se sabe que en todas las casas cuecen habas. El “fichaje” hace su particular campaña en las redes sociales.

¿Cuál será el futuro de Salud Anguita en el Ayuntamiento?

La concejala Salud Anguita continúa como portavoz de Vox en el Ayuntamiento de Jaén a pesar de que está suspendida de militancia y el partido con el que se presentó a las últimas elecciones municipales considera que no le representa. Interpuso una demanda contra la dirección nacional y, sin embargo, el Juzgado de Primera Instancia número 1 de Jaén la ha desestimado. No es firme, pero todo hace indicar que puede haber un replanteamiento de su posición en la Administración local, donde ni siquiera hay filin con su compañero Manuel Ureña, a quien pretendió retirar la asignación municipal en el último pleno. La diatriba está en que no tiene retirado el carné, sino solo una suspensión durante dos años, que incluye no poder desempeñar cargo público.