Una carrera de fondo

Sirva de preámbulo que esta crónica puede quedar en un brindis al sol, en agua de borrajas o en una declaración de intenciones si, finalmente, se produce la callada por respuesta o ese “no” tan rotundo que impera en la trastienda del Partido Popular. Nadie puede esconder que suenan tambores de adelanto electoral y ni que decir tiene que lo que ocurra en el contexto autonómico tendrá su particular réplica en cada una de las provincias, con sus pueblos y ciudades incluidos. La gran incógnita está en conocer qué pasará con Ciudadanos, porque lo inédito del gobierno de coalición con el Partido Popular no es solo el pacto en sí, sino la casi perfecta sintonía entre el presidente y el vicepresidente, Juanma Moreno y Juan Marín, respectivamente, que hace pensar en coaliciones de futuro para que el trozo de la tarta sea más grande. Hay muchas incógnitas, todo está abierto de par en par y, sin embargo, los movimientos se suceden con el fin de ganar tiempo para que nadie vaya con el pie cambiado en el pasodoble que acompaña a la cita con las urnas. Lo primero es lo primero y, en este sentido, cerrar el mapa de candidaturas en las capitales empieza a quitar el sueño en aquellas fuerzas políticas en las que la búsqueda se convierte en una obsesión.

Está claro que Julio Millán repetirá como aspirante al bastón de mando por el Partido Socialista y, si no cambian mucho las cosas, el objetivo es que María Orozco haga lo propio por Ciudadanos. ¿Quién será el número uno del Partido Popular en Jaén? Responder a esa pregunta es algo así como acertar con la terminación del “Gordo” de la Navidad. Sin embargo, hay pistas que desembocan en una persona que cumple perfectamente el perfil que busca la nueva dirección provincial, encabezada por Erik Domínguez. Su nombre suena cada vez con más fuerza y, aunque él lo niega, será cuestión de esperar para que el melón madure antes de hacerlo trizas. José Agustín González Romo, actual secretario general de Empleo y Trabajo Autónomo de la Junta de Andalucía, reconoce que hasta el propio presidente de la Diputación Provincial de Jaén, Francisco Reyes, le preguntó el viernes qué había de cierto en lo que ahora mismo no es más que un rumor. Él, centrado en un proyecto de Ciudadanos al que llegó como independiente, asegura que está centrado en lo que tiene que estar y su compromiso y su lealtad están por encima de todo. No es un “no” rotundo ni un descarte taxativo. Es una cuestión de tiempo, porque lo que sí es cierto es que no hay absolutamente nada cerrado en el seno de una fuerza política que tiene fácil, históricamente, ganar en la capital. Otra cosa es gobernar. Acertar con el candidato será crucial para el futuro. En la formación naranja están convencidos de que el grado de convencimiento es extremo. En la azul aseguran que no las tienen todas consigo y niegan, insistentemente, cualquier propuesta hasta que la “cosa” no sea firme. Será fruto de la casualidad, o no, pero el caso es que el secretario general de Empleo, alejado de los focos, empieza una carrera de fondo con una agenda activa en la capital con medios de comunicación entre los invitados.

Para quien no le conozca, José Agustín González Romo tiene 47 años, es licenciado en Derecho por la Universidad de Jaén y, desde 2003, pertenece al Cuerpo Superior de Técnicos de la Administración de la Seguridad Social. Fue consejero de Trabajo, Migraciones y Seguridad Social en Rabat (Marruecos) y director provincial de la Tesorería de la Seguridad Social en Jaén. Hijo de un pediatra conocido de la ciudad, el reto está en convertirse en un rostro conocido entre el ciudadano de a pie para empezar a dar guerra política. Quédense con esta fotografía.

Nada está resuelto con vistas al congreso provincial del Partido Socialista, previsto en el contexto de los mantecados y las zambombas. Queda tiempo para ver qué ocurre en el seno de una fuerza política en la que los movimientos cada vez son más grandes. Por un lado están los que quieren renovación, la misma que proclama Juan Espadas en Andalucía, y por otro los que están a la espera de la decisión del actual líder en Jaén, Francisco Reyes, con pretensiones de continuidad en una provincia con el mapa electoral en rojo. No son cuatro o cinco, si seis ni diez, las agrupaciones que buscan una candidatura de integración en la que tengan cabida todos. El viernes hubo una reunión, con una buena representación de secretarios locales, con el fin de consensuar una propuesta en la que los “tiros” van por situar al alcalde de Marmolejo, Manuel Lozano, como secretario general del PSOE en Jaén y a Francisco Reyes como presidente. El objetivo es evitar que haya elecciones primarias para evitar roces internos que lo único en lo que pueden ahondar es la fragmentación de un partido que necesita unión para afrontar el reto de Andalucía y mantener a flote la Diputación Provincial de Jaén. No es poco.