En vías de solución

Gerardo Aceituno hace un llamamiento a calma después de recibir una carta de los coordinadores locales de Vox en la que anuncian dimisiones en cascada si continúa Carmen García

15 ago 2022 / 16:00 H.

En la fotografía aparece con Iván Espinosa de los Monteros y con Benito Morillo, dos pesos pesados, cada uno en su ámbito de acción, en una fuerza política con tirón nacional. Su nombre es Gerardo Matarán y, hasta hace unos días, ejercía de coordinador de Vox en Alcalá la Real, Alcaudete, Castillo de Locubín, Frailes y Valdepeñas de Jaén. Es uno de los dos representantes orgánicos que dimite en la última semana por desavenencias con la gestión interna de un partido que, ahora, hace borrón y cuenta nueva para renacer entre las ascuas encendidas de las últimas elecciones autonómicas. El otro es Francisco Zullar, su homónimo en Santisteban del Puerto. La amenaza del efecto dominó es tan real como la vida la misma y, aunque puede que la sangre de los anunciados ceses llegue el río, la nueva dirección provincial mueve ficha para que las aguas vuelvan a su cauce.

Sirva de precedente que está recién salido del horno el nombramiento de Gerardo Aceituno como presidente provincial de Vox, un empresario jiennense llamado desde Madrid a recomponer una organización que confía en ser alternativa en las próximas citas con las urnas. En pleno mes de agosto, trabaja sin descanso para configurar el organigrama interno con el que afrontará todos los retos que tienen pendientes los de Santiago Abascal en Jaén, una provincia en la que resulta complicado dar la vuelta a la tortilla a la hora de votar, pero en la que las encuestas apuntan a un cambio de rumbo hacia la derecha que se presenta como una oportunidad para quienes están en este cotarro. Mientras habla con unos y con otros para elegir a los mejores en su equipo, en masculino y femenino, el dirigente se ve obligado a salir del paso que los coordinadores locales dieron con la presentación de una carta en la que dejan clara su postura. “En primer lugar queremos manifestar que esta misiva nace desde el respeto, la cautela, la necesidad de mejorar y el análisis profundo de la realidad que hemos vivido en el partido en Jaén”. Ese es el punto número uno de siete, en los que expresan su “firme descontento” con el modo en el que desarrolló la campaña electoral el Consejo Ejecutivo Provincial de Jaén. “Entendemos que no ha actuado con la diligencia debida, ni ha sabido ejercer la más elemental tarea de colaboración y engranaje de los medios con los que contaba; más bien al contrario, ha sido un elemento de distorsión, improvisación y mala gestión”. Y, sin rodeos, ponen nombre y apellidos a la autora material de los hechos: Carmen García Aguilar. Textualmente: “Su despotismo y malas formas ha hecho que los abajo firmantes no hayamos dejado la campaña y la hayamos terminado solamente por nuestro compromiso con el partido y con España y porque entendemos que la provincia no se merece otro cataclismo y nuestro afán es afianzar el proyecto y llevarlo donde se merece”. Exigen, en el punto número seis, su cese y, en el siete, la amenaza de la cascada de dimisiones. Detrás de todo esto se esconde la estampida del expresidente, Benito Morillo, forzada o no, de la estructura orgánica.

En vías de solución

El caso es que Gerardo Aceituno anuncia que en los primeros días de septiembre dará a conocer a su equipo y, entre las seis personas que lo acompañarán, no está ella, señalada con el dedo de los suyos por su cuestionada forma de entender el partido. Asegura el presidente que ya tiene cuatro nombres “potentes y de renombre en Jaén” y su estrategia está diseñada para convertirse en una alternativa real electoral. Hace un llamamiento a la calma entre la docena de coordinadores que son, hasta el momento, los que sostienen a Vox en los municipios en los que rascar votos no es una cuestión baladí.

Empieza la cuenta atrás para dar a conocer al candidato del PP

Hay diferentes formas de dar a conocer a un candidato a la Alcaldía de una capital cuando su cara es popular en el seno interno de la Administración, fundamentalmente por su trabajo, pero no en la calle. El camino elegido por Sevilla concuerda con lo que quiere el Partido Popular de Jaén para quien se enfrentará en las próximas elecciones municipales al mayor rival político, Julio Millán, quien tiene el poder actualmente en el Ayuntamiento de Jaén. El hasta ahora secretario general de Empleo y Trabajo Autónomo, cartera que en la pasada legislatura estaba en manos de Ciudadanos, pasa a formar parte del equipo de Catalina García, la consejera de Salud y Consumo de la Junta de Andalucía. Agustín González Romo se convierte en director general de Consumo en el mandato de la mayoría absoluta. “Dejo de ser secretario de Empleo y Trabajo Autónomo para afrontar un nuevo reto que empezaré con mucha ilusión y respeto, pero también con la tristeza de dejar un gran equipo, dijo en las redes sociales. Quede claro que él nunca fue de Ciudadanos, sino que dejó el Partido Popular para dedicarse a Empleo y, después, regresó a la militancia convencido del lugar que ocupa. Todos dan por hecho que él será el “elegido”.

EN CORTO. El portavoz se reserva para septiembre

El Gobierno de Juanma Moreno aprobó el martes pasado, en su cuarta reunión desde su constitución el pasado 25 de julio, los decretos de estructura que culminan el diseño del Ejecutivo de la mayoría absoluta del Partido Popular. En un “tiempo récord”, según anunció el consejero de Presidencia, Antonio Sanz, se culmina una tarea que en la anterior legislatura, en coalición con Ciudadanos, tardó más de un mes y que con gobiernos anteriores incluso se prorrogó a veces durante meses. Solo queda la incógnita de quien ocupará la portavocía, algo que el presidente se reserva para septiembre, según fuentes de su equipo, que aseguran que “no hay prisa” y que, después, llegará el turno de poner cara a los delegados territoriales en las ocho provincias.