El penúltimo capítulo

Cúmulo de desencuentros entre “Jaén Merece Más” y “Levanta Jaén” con un trasfondo histórico que, al final, termina con la primera candidatura nacida del movimiento ciudadano

23 may 2022 / 16:42 H.

No es la primera vez, tampoco será la última, que nace un partido de un movimiento ciudadano. La vida da tantas vueltas que quienes criticaron a los que dieron el salto a la política desde las asociaciones de vecinos tienen impreso su nombre, ahora, en una candidatura electoral. No digas nunca de esta agua no beberé. Así de fácil y así de complicado. Hay un ejemplo claro en la capital. A María Cantos le hicieron un traje completo cuando aprovechó el trampolín de “OCO” para llegar hasta el Ayuntamiento de Jaén, en aquella época en la que confió en Ciudadanos, y los que se empeñaron en esa confección a medida, imposible de relatar con nombres y apellidos, tienen diseñada la lista con la que concurrirán a las autonómicas bajo el paraguas de “Jaén Merece Más”.

El “olor” a la política empezó a emanar en aquella manifestación, en forma de caravana, con la que la plataforma vecinal se vino arriba. Fue tan bestial la respuesta de los jiennenses a una convocatoria con la que explotó el enfado concentrado en las administraciones públicas, fundamentalmente en el Gobierno central, que quienes están al mando del colectivo de colectivos empezaron pergeñar otro movimiento con el beneplácito de los que promueven la España Vaciada. La simulación de un Teruel Existe en Jaén era la pretensión inicial y, aunque continúan las piedras en el camino, el objetivo es que también sea la final. El caso es que la bola se hizo cada vez más grande, las plataformas ciudadanas se unieron en una coordinadora llamada “Levanta Jaén” y la voz cantante, “Jaén Merece Más”, fue la primera en dar el paso para convertirse en un partido político.

Ahí empezó el primer capítulo de desencuentros, derivados de afanes de protagonismo y egolatrías personales que conducen al camino que lleva a ninguna parte. Muchos interpretaron la guerra como una batalla entre la capital y la provincia con un trasfondo histórico y sin sentido con Linares como telón de fondo. El caso es que los que se mantuvieron firmes a esa filosofía de movimiento ciudadano se apartaron de la escena y los que tenían las ideas claras de reconversión siguieron adelante faltos de altura de miras y de generosidad. Firmada la sentencia de la escisión entre “Jaén Merece Más” y “Levanta Jaén”, con registros de nombres de por medio que levantaron más polvareda de la existente, hubo alguien que levantó la mano para intentar mediar y reconducir la situación. Manuel Barrionuevo, el “ex” de la Cámara de Comercio, fue el elegido para hablar con unos y con otros bajo el expreso convencimiento de que si no hay unidad no habrá votos que rascar.

Más vueltas que un trompo tuvo que dar el empresario hasta conseguir la escenificación de la integración con un apretón de manos entre Juanma Camacho y Javier Saigner, los representantes de los dos movimientos de la discordia. Sin embargo, el emblema de la unidad se hizo añicos unos días después, de tal forma que acabó el plazo para registrar partidos ante la Junta Electoral sin posibilidad de confluencia. Antes de que llegara la sangre al río, tras los correspondientes tiras y aflojas propios del principiante, se cerró otro acuerdo, “in extremis”, mediante el que “Jaén Merece Más” se salió con la suya. Los jiennenses podrán elegir la papeleta que habrá con ese nombre en las elecciones del 19 de Junio, donde se integran candidatos independientes de “Levanta Jaén”. No fue fácil buscar a esa alternancia paritaria de hombres y mujeres que se estrenarán en las urnas con un objetivo: revolucionar el tablero político de una provincia eminentemente socialista. Conseguir un diputado autonómico no será cuestión de coser y cantar.

Once años con un tranvía parado que nadie fue capaz de resolver

No puede ni debe pasar por alto la situación que vive la capital con un tranvía que cruza de norte a sur, y viceversa, que simula la dejadez con la que tienen que convivir los jiennenses cada día. La legislatura autonómica está a punto de terminar y, digan lo que digan, el compromiso expreso del presidente de la Junta de Andalucía, Juanma Moreno, y del vicepresidente, Juan Marín, de ponerlo en funcionamiento no se ha llegado a cumplir. Cierto es que se han dado más pasos en los últimos cuatro años que en los seis anteriores para remediar la situación, pero el ciudadano percibe que todo sigue igual, o peor aún, porque el abandono del trazado tranviario es cada vez más evidente con un cúmulo de desperfectos que engrandece la cuenta de lo que costarán los arreglos. El alcalde de Jaén, Julio Millán, en los prolegómenos de una convocatoria electoral, arremete contra la lentitud de los plazos previstos después de hacerlos deberes correspondientes en cumplimiento de un acuerdo a dos bandas que resultó histórico. El viceconsejero de Fomento, Mario Muñoz-Atanet, se escuda en un proceso burocrático en el que la maquinaria de los contratos para poner en marcha el tranvía sigue su curso. Y, mientras, nada de nada.

En corto. Gestora en el Partido Popular de Los Villares

Fue la única agrupación díscola con la nueva dirección provincial del Partido Popular que lidera Erik Domínguez. Los Villares rompió la disciplina de partido y, al final, los seis concejales dimitieron para pasar al grupo de los no adscritos. El parlamentario Francisco Palacios se culpó a Erik Domínguez de la situación, por buscar una candidatura alternativa para las próximas elecciones, pero detrás se esconde su paso a otras siglas que tendrán mucho que decir en el tablero político del mundo rural. El tiempo dará o quitará razones en un municipio gobernado, ahora, por el Partido Socialista y con la amenaza de Vox palpable en el ambiente.