El otro caballo de batalla

Queda reactivada la plataforma de alcaldes de Jaén y de Córdoba para reivindicar la construcción de una carretera de alta capacidad entre las dos únicas provincias que no tienen conexión por autovía

16 jul 2024 / 08:00 H.

Martes, 11:00 horas, Pilar de Moya. La plataforma que, en 2020, crearon los alcaldes de los municipios que discurren entre Jaén y Córdoba por El Carpio se reactiva después de comprobar el resultado de unas obras que a pocos contentan. Están convocados los máximos dirigentes municipales de Torredonjimeno, Bujalance, Valenzuela, Cañete de las Torres, Escañuela, Higuera de Calatrava, Jamilena, Arjonilla, Lopera, Villardompardo y El Carpio, capitaneados por el de Porcuna, para retomar una histórica reivindicación en la que ningún partido político sale bien parado: la construcción de una autovía que conecte las dos únicas provincias de Andalucía que no están unidas por una carretera de alta capacidad. “La gran estafa”. Este será el titular de las mociones que se presentarán en los plenos de los ayuntamientos, de la recogida de firmas que cundirá entre los ciudadanos y de los carteles que colgarán en todos los puentes como medidas de presión para que la Administración que tiene las competencias en la A-306, la Junta de Andalucía, retome un proyecto que todos se empeñaron en meter en el cajón del olvido. Habrá que ver quién se coloca en la fotografía en un asunto político de vital importancia para el desarrollo de la provincia en el que viene como anillo al dedo el refrán “Entre todos la mataron y ella sola se murió”. Las hemerotecas demuestran que aquí no hay quien se salve de un cúmulo de iniciativas, propuestas legislativas y pancartas en las que todos quedaron retratados para la posteridad, porque ni el Partido Socialista cumplió sus promesas cuando dirigía la institución autonómica ni el Partido Popular mueve ficha ahora que tiene la sartén por el mango. La verdad duele y, aunque haya quienes piensen que Miguel Moreno estuvo de brazos cruzados con Ciudadanos en el Gobierno del cambio, lo cierto es que fue en ese momento cuando impulsó la creación de una plataforma que ahora retoma con fuerza.

Los alcaldes tienen un papel difícil en esto de la reivindicación de una autovía por un trazado de apenas sesenta kilómetros con tendencia al esquivo, porque hay quienes que, para ir a Sevilla, optan por el camino más largo, el de la A-311, donde las obras de reforma tienen grandes pretensiones, presumiblemente, con la construcción de accesiones que un informe profesional, encargado “ad hoc”, demostrará. El caso es que ahora llega el momento de la verdad, de comprobar quiénes están por la labor de trabajar por su municipio o por el partido político con el que concurren a las elecciones municipales y de demostrar públicamente si la constitución de una plataforma fue un brindis al sol convertido, en este instante, en un tapón que impida el avance. El alcalde de Porcuna, una vez más, lanza un órdago a quienes firmaron aquel documento de constitución para que se sumen a las acciones de protesta que se darán a conocer mañana. Considera que la reforma realizada es un sacrificio a cualquier posibilidad de construcción de una carretera propia del siglo XXI, con diez minutos más de retraso y aumento de la peligrosidad, por lo que, después de la lucha con final por retirar el expediente “Paisajes del Olivar” y tras la inauguración de la cisterna romana de La Calderona, vuelve a la carga con un mensaje enviado a los alcaldes en el que apela a sumarse al carro: “Como he hablado en varias ocasiones con algunos de vosotros, creo que estamos muy impasibles ante el olvido absoluto de la futura autovía A-306 que une las dos capitales de la provincia Jaén y Córdoba”. Y añade: “Mis compañeros del equipo de Gobierno y yo vamos a anunciar una serie de medidas reivindicativas para que se retome en serio”. Invita a sumarse en el empeño de su consecución. Palabra de alcalde.

<i>La A-306, en el kilómetro 44 de la vía autonómica.</i>
La A-306, en el kilómetro 44 de la vía autonómica.

Otro capítulo más de cómo la política termina en los juzgados

Ocurrió la semana pasada y, aunque la noticia tuvo más repercusión mediática en Cádiz que en Jaén, el protagonista es de la tierra del mar de olivos, quien anunció una demanda judicial por vulneración de su honor. El presidente de la Diputación, Francisco Reyes, tiene denunciada a la alcaldesa de Jerez de la Frontera y presidenta de la Federación Española de Municipios y Provincias (FEMP), María José García-Pelayo, por decir lo que dijo, el 21 de marzo, un consejo territorial: “No tenemos recursos, ya habéis escuchado a los alcaldes, venga... Sí hay dinero para comprar ayuntamientos, como estáis haciendo vosotros en Jaén. ¿Para eso sí? Venga, por favor. Ha salido en los medios de comunicación, que el PSOE le ha ofrecido al Ayuntamiento de Jaén condonarle toda la deuda, por Dios, que ya está bien”. La demanda está ya en el Juzgado de Primera Instancia de Jaén por posible “intromisión ilegítima en el honor”, tras realizar “unas declaraciones injuriosas y haber transmitido una información absolutamente falsa que afectan a su reputación y buen nombre”, tal y como recoge la exposición de motivos. Se trata de otro capítulo político en manos de un juez, por aquello de restablecer una imagen puesta en tela de juicio.

EN CORTO. ¿Tendrá consecuencias el rifirrafe?

“Hipoglucemia”. Así calificó el presidente del Parlamento de Andalucía, Jesús Aguirre, el motivo de la trifulca política entre el consejero de Turismo, Cultura y Deporte y la portavoz del PSOE. Comenzaba su intervención Arturo Bernal, sobre un decreto ley para la racionalización del agua en el uso turístico, cuando asaltó una especie de arrebato resumido en esta frase: “Veo que a nadie de la bancada de la izquierda le importa un pito”. Respondió veloz como un rayo la jiennense Ángeles Férriz: “¡Qué vergüenza! ¿Usted es el consejero de Cultura?”. Continuó el rifirrafe con declaraciones de él a ella: “Te aguanto todos los días detrás de mi cabeza y das mucha vergüenza”. No se quedó la carolinense callada y le afeó su “chulería”. Hasta que Jesús Aguirre puso paz con cinco minutos de reflexión que supieron a gloria.