El culebrón político

¿Quién dijo que los plenos del Ayuntamiento de Jaén son aburridos? Cierto es que nada tienen que ver con los de antaño, aquellos en los que era necesario ir acompañado de la tradicional talega para no morir en el intento de una jornada que comenzaba a las nueve de la mañana y terminaba a las tantas de la noche. Entonces sí que había cruzada de sables dialécticos con discursos con sobrada capacidad como para mantener al público sin pestañear. Y eso que no había internet ni manera de ver el espectáculo a través de las inexistentes redes sociales. Lo de hoy en día es otra forma de hacer política. Sin embargo, de vez en cuando surgen rocambolescas escenas que acercan el culebrón y la salsa rosa al escenario municipal, donde se toman las grandes decisiones que afectan al jiennense del día a día. Los dos concejales de Vox fueron, el viernes pasado, los protagonistas de un capítulo novelado para enmarcar.

Tomen asiento. Salud Anguita retomó su protagonismo como portavoz de Vox después de una baja laboral en la que, entre bambalinas, hubo intentos serios por parte de su compañero de filas, Manuel Ureña, para conseguir arrebatarle el puesto en base a una decisión que, en su día, tomó su propio partido. La historia comenzó cuando la organización que lidera en España Santiago Abascal dio el paso para suspender de militancia, durante dos años, a quien fue la cara visible de esta fuerza política en la provincia. El concejal que la acompaña desde el comienzo de la legislatura entendió que, inhabilitada como está cautelarmente, no tenía potestad para representar a Vox en el Ayuntamiento y pidió al alcalde, Julio Millán, y a los tribunales ser él el portavoz de Vox. Lo de la Justicia está pendiente de resolver, después del carpetazo de las medidas cautelares, pero la petición realizada al máximo dirigente quedó en agua de borrajas con un rechazo que sorprendió a propios y extraños.

El caso es que, en el último pleno, Salud Anguita recuperó su papel de protagonista y, con Manuel Ureña como estrella invitada, escenificaron un “papelón” en el que, sin tapujos, llevaron el culebrón al salón plenario. La división de Vox quedó representada con una confrontación en la que quedó claro quién manda, por el momento, con inhabilitación provisional incluida. Provisional porque se dirime en los juzgados, en este momento, una denuncia que la portavoz interpuso contra su partido para pedir la nulidad de la suspensión cautelar de militancia, un juicio que está pendiente y señalado para mediados de enero. Sirva de inciso que la ausencia de una orden de expulsión expresa fue lo que hizo que el secretario del Ayuntamiento emitiera un informe favorable para la tosiriana que, finalmente, rubricó Julio Millán. .

Curioso es el lugar en el que tomaron asiento. Manuel Ureña pidió, mientras Salud Anguita estaba de baja, un cambio en el salón de plenos para evitar estar juntos cuando se produjera su incorporación. Consiguió colocarse al lado de la bancada del PP para que su compañera pasara, después, al lugar en el que están los concejales no adscritos. Sin embargo, cuando ella regresó, también solicitó un cambio y, finalmente, fue él quien tuvo que sentarse al lado de María Cantos, Miguel Castro y Bruno García. Así de rocambolesco. Paréntesis aparte, los dos concejales que consiguió Vox en el Ayuntamiento de Jaén trabajan, ahora, sus mociones por separado y, aunque ambos intentan defenderlas, solo ella tiene potestad para intervenir. El papel de Manuel Ureña quedará relegado a su trabajo en solitario, despojado de despacho, con presencia en las comisiones de Imefe y Urbanismo y las reuniones que él mismo quiera organizar con la sociedad jiennense. Los técnicos que tiene asignados el grupo municipal están a disposición de ella, liberada al cien por cien, frente al cincuenta de él. Así está el “patio” en el seno de una organización que toma nota de todo. En el pleno estuvieron Susana Suárez, responsable de Intermunicipal de Vox nacional; la coordinadora del Sur, Teresa Alonso, y la de concejales de Andalucía Oriental, Monserrat Cervantes. También el coordinador de Jaén, Manuel Gordo. Lápices bien afinados para trasladar todo lo que pasa en Jaén, porque lo que sí está claro es que Vox trabaja para conseguir la expulsión definitiva de una mujer que consideran que no les representa.

Huelga decir que la despoblación que sufre Jaén nada tiene que ver con la que hay en otros lugares de España, como Teruel, Soria o Cuenca. Los datos en la provincia, aunque no son buenos, sí resultan mucho más contenidos dentro del panorama de la España Vaciada, un movimiento en el que están incluidas las plataformas de “Levanta Jaén” y que busca su sitio político con vistas a las próximas citas electorales. “Rula” por las redes sociales una encuesta realizada por “electomanía.es” que incluye a “Jaén Merece Más” en los sondeos y que da un escaño al colectivo en unos hipotéticos comicios generales. El colectivo, que aprobó en asamblea utilizar la marca con fines políticos, quiere agotar todas las posibilidades de unidad antes de su constitución en agrupación electoral o partido político, porque el hecho de que “Jaén Merece Más” vaya por un lado y el resto de socios de las plataformas de la provincia por otro lo único a lo que conllevará es a disgregar mucho más el voto. En este momento, busca candidatos para conformar las diferentes candidaturas a los comicios andaluces, generales e, incluso, municipales. La asociación quiere jiennenses profesionales de diferentes ámbitos para concurrir a las citas con las urnas con garantías de apoyo suficientes por parte de la ciudadanía para conseguir representación.

Representó a la provincia, como número dos del Partido Socialista, en las elecciones generales que encabezó Felipe Sicilia y, desde que debutó en el Congreso de los Diputados, se prepara tan concienzudamente sus intervenciones que acapara la atención de los asistentes en esas largas mañanas plenarias. La linarense Laura Berja se convierte en el centro de la mirada de los periodistas parlamentarios de España, cuya asociación la ha incluido en la terna como candidata a diputada “revelación” en los Premios Parlamentarios 2021, entre los que se encuentran también Marga Prohens (PP); Marta Rosique (ERC) y Mireia Vehí (CUP). Ella, que fue una de las que promulgó el cambio en el seno interno del Partido Socialista en Jaén, despunta en el ámbito nacional.