Dos no se pelean...

El rector de la Universidad de Jaén denuncia incumplimientos del actual modelo de financiación y el delegado de la Junta de Andalucía en Jaén se posiciona al lado de la gestión autonómica

26 nov 2024 / 08:00 H.

Estaban los rectores de las universidades andaluzas con la “muit achantada” y, a la espera de una reunión que no se produjo, consideraron conveniente usar el comodín del altavoz de los titulares. Es lo que tiene el derecho al pataleo. Cada uno en su casa hizo lo que debía hacer. El máximo dirigente de la institución académica jiennense, Nicolás Ruiz, tiró del manual del Consejo de Gobierno para poner las cartas sobre la mesa y, con datos en la mano, recordó que los compromisos están para cumplirlos. El modelo de financiación de las entidades andaluzas colmó el vaso de la paciencia en la recta final del mandato de Juan Gómez y, justo cuando el rodaje del sucesor está más que resuelto, se repite una historia que no ha hecho más que empezar. Esto no es una batalla. Es una auténtica guerra. Política.

La cosa va de números. El consejero de Economía, Conocimiento, Empresas y Universidad, Rogelio Velasco, en la primera legislatura de Juanma Moreno al frente de la Junta de Andalucía, impuso un sistema de reparto presupuestario que movió los cimientos del conocimiento y trasladó a la calle un malestar intelectual nunca visto. Hubo reculada, con derogación incluida y promesas que, a la postre, van camino de convertirse en las del oro y el moro. El estreno del cuarto rector de la historia de la Universidad de Jaén fue con un nuevo modelo de financiación ligado al tiempo, porque será el devenir de los meses y de los años lo que determinará si es bueno, regular, malo o peor. Un asunto es el dinero que llega a estos organismos, imprescindibles en el paisaje, a través de las cuentas de la Administración autonómica y otro distinto es el que debe llegar por los conductos del modelo de financiación y de la mesa de negociación. No se trata del sudoku ni del tetri. El juego está en cumplir lo que estrecharon las manos de unos y de otros, casi todos hombres, por cierto, entre los dirigentes de las universidades públicas y el actual consejero de Universidades, Investigación e Innovación, José Carlos Gómez Villamandos, quien, perdón por el símil, fue monje antes que fraile.

El caso es que Nicolás Ruiz se vio obligado a colocarse la chaqueta política que reserva para las ocasiones especiales todo rector para, sin pelos en la lengua, salir a la palestra de lo público llamando pan al pan y vino al vino. Fue el primero en denunciar una retahíla de irresponsabilidades y de sospechas fundadas que, al día siguiente, repitieron sus compañeros en el resto de las provincias. El tiempo apremia. Hay demasiadas asignaturas pendientes de aprobar antes de que suenen las campanadas y nadie está dispuesto a repetir el examen ni a recuperar lo que puede resultar irrecuperable. Se armó la marimorena sin zambombas ni luces de postín. No hizo falta parafernalia navideña para liarla parda con el altavoz de los titulares.

Lo mismo que otros rectores no obtuvieron respuesta política en sus respectivos territorios comanches, el jiennense sí tuvo coronel que le escribiera. El delegado del Gobierno andaluz en Jaén, Jesús Estrella, no lo pudo remediar y, como más vale vergüenza en cara que dolor en el corazón, hizo una defensa política que fue calificada por su interlocutor, más tarde, de “demagogia”. Tuvo en sus manos el representante autonómico elogiar el esfuerzo de la Junta de Andalucía por incrementar las partidas universitarias y, a la vez, situarse al lado de la Universidad de Jaén, que no es otra que la suya, lo mejor que tiene una provincia necesitada de buenas noticias como fue la de su creación hace más de treinta años. No lo hizo. Rectificar siempre fue de sabios y dos no se pelean si uno no quiere.

Dos no se pelean...

Los tres senadores del PP intervienen juntos por primera vez en el Senado

Ocurrió el martes pasado. Por primera vez, los tres senadores que tiene el Partido Popular de Jaén en la Cámara Alta intervinieron en la tribuna para reclamar una de las principales armas que necesita la provincia para conseguir el progreso, el crecimiento, la vertebración y el equilibrio territorial. Fue en la Comisión de Transportes y Movilidad Sostenible. Mariola Aranda, Francisco Javier Bermúdez y Javier Márquez reivindicaron mejoras ferroviarias y sensibilidad con los jiennenses. No es nueva la rogativa. Lo mismo lo hicieron los socialistas cuando el Partido Popular alcanzó el Gobierno, por lo que la noticia no está en los dimes y diretes políticos que lo único que hacen es enconar y enojar a los ciudadanos que, cada cuatro años, asisten de forma fiel a su cita con las urnas. La noticia está en la curiosidad de que los tres senadores se vean las caras en una misma tribuna y, además, ante el mismísimo ministro de Transportes. Oscar Puente respondió con datos contantes y sonantes mediante los que quiso dar muestra de la apuesta firme del Ejecutivo central por las infraestructuras de comunicación, como la A-32. También se comprometió a que las obras del ferrocarril afecten de la menor manera posible a Jaén.

EN CORTO. Una jiennense en el equipo de Susana Hornillo

La excoordinadora provincial de Podemos en la provincia de Jaén, Lola Rodríguez, liderará la participación de la militancia jiennense en el equipo de Susana Hornillo para renovar la dirección del partido en el ámbito autonómico. Hay que recordar que dimitió como, el mes pasado de julio, en protesta por la falta de apoyo de la dirección andaluza a la provincia de Jaén. Maestra jubilada y experta en Género e Igualdad de Oportunidades por la Universidad de Jaén, su trayectoria ha estado vinculada al movimiento feminista y la defensa de la escuela pública como instrumento para la educación en igualdad. Junto a Rodríguez, también formarán parte de la candidatura la activista por la Educación Pública y sindicalista de Ustea, Inmaculada Díaz, y la militante de Podemos Úbeda Maribel Soriano.