Jaén, Jaén, Jaén, Jaén...
Es el otoño inmenso en Jaén, aprovechemos este puente para salir a respirar aire puro, disfrutar de sus paisajes y saborear una gastronomía popular fuera de lo común >> Y es que en Jaén no hay alegría pequeña, porque el paraíso está aquí >>
Hablan, hablamos, de futuro en Jaén y lo hacemos a boca llena sin llegar a ser conscientes realmente del presente padecido, quizá también porque hemos de ilusionarnos con horizontes distintos, que la resignación y el victimismo nos trajeron apatía y falta de combatividad y, consecuentemente, un lastre en todos los órdenes de la vida, hasta en el deportivo, no tan intrascendente por lo que de economía y autoestima provoca en una sociedad. El futuro de Jaén cabe en cuatro letras, mismamente las que conforman el topónimo de esta tierra de ir y venir, encrucijada de caminos que ahora mismo puede ser su punta de lanza hacia eso que denominamos progreso y desarrollo. Jaén, Jaén, Jaén, Jaén... cuatro veces Jaén, las mismas veces que deberíamos recordarnos a nosotros mismos que este puente, por ejemplo, viajemos por Jaén.
En caso de duda, Jaén, siempre Jaén para disfrutarlo y para vivirlo; si necesitamos aires nuevos porque siempre vemos las mismas cuatro paredes, Jaén, cualquier rincón de Jaén; si nos da el bolsillo para coger un avión y perdernos, ‘volemos’ a cualquier rincón alejado de Jaén, en avioneta, en ultraligero, estaremos en un santiamén, en coche tenemos aldeas a cuatro horas de camino en un fantástico viaje de colores y de sabores; si recibimos familia allende nuestras fronteras por el Puente del Pilar, transitemos por sus Parques Naturales a cual más distinto, cada uno con su impronta paisajística y humana; si tenemos familia en ese mosaico sin igual de pueblos y ciudades, los del viejo Santo Reino, dejémonos llevar por la sangre y volvamos a nuestras raíces a compartir y a vivir, a ser como siempre fuimos, gentes apegadas a la tierra de unos ancestros que conformaron paisaje y paisanaje, frontera tras frontera, civilización tras civilización... En definitiva, si quieres que Jaén se convierta en algo más que un mar de olivos que no sabe vender su propio oro líquido, apuesta por los tesoros monumentales de Jaén, sus montañas y sus valles, que sus buenas gentes te lo agradecerán siempre y tú, no lo olvidarás jamás.
Santiago Ydáñez
No hay otro pintor de Jaén referencia artística mundial como este serrano de Puente de Génave
En una tierra de grandes pintores como Jaén, parecía no haber hueco para otra forma de expresión artística que la tradicionalmente alabada. Hasta que llegó un serrano que ejerce de serrano y no olvida de donde viene: Santiago Ydáñez, a quien la Universidad de Jaén acaba de concederle el “Natural de Jaén”. Su pintura es única, por su formato y por su mensaje, por la atmósfera que tienen todos sus cuadros y, muy especialmente, porque ahora mismo es uno de los mejores embajadores de Jaén.
De cofradías y de poses
Lleva años vegetando la Cofradía de Santa Catalina, no está apegada a ningún barrio, no está de moda portarla ni honrarla porque es la patrona ‘pobre’ de la ciudad, solo una gente entusiasta. anónima y creyente hasta más no poder ha impedido que se convierta en historia de Jaén. Ahora se lanza un SOS desesperado de quienes se resisten a su desaparición, ayuda y consideración, entrega y fervor, pasión y creencia... pero no, en este tiempo de cofradías igual a pose, los mortales huímos si no hay focos.
Vincent Van Gogh, pintor holandés: “Si escuchas una voz dentro de ti que dice ‘no puedes pintar’, entonces, por supuesto, pinta, y la
voz será silenciada”.
>>¡Hay que ser uno mismo, sin duda! ¡Olvidemos el qué dirán!
Pau Gasol, baloncestista: “Mi carrera ha superado todos mis sueños y expectativas. Siempre intenté ser mejor trabajando”.
>> ¡Grandiosa su gesta, ejemplarizante su comportamiento!
Lourdes Jiménez, maestra en Sorihuela:
“Por los apuntes no se puede enseñar a vivir. Aprender para vivir, para la vida, en la vida y de la vida”.
>> ¡Joven, de Jaén y reconocida mejor maestra del mundo!
¿Por qué Jaén sigue sin Cámara de Comercio y los empresarios se tienen que ir a la de Andújar?
¿Qué Feria le espera a la gente “de una edad” si el Real se convierte en auténtico botellódromo juvenil?