Berrea, espectáculo electoral

05 oct 2019 / 13:02 H.

Es tiempo de berrea y de ronca en la sierra. La lucha natural de ciervos y gamos por aparearse de la mejor forma posible por aquello de preservar la especie y con tal propósito se muestran como machos alfas para concitar toda la atención. Esta sonora llamada animal tiene sus tiempos marcados por el comienzo de las lluvias que, como un resorte, recuerda la necesidad de buscar pareja. Instinto natural en otoño. Son los cérvidos mucho más ordenados que la especie humana que, por el contrario, es capaz de estar en permanente estado de berrea, marcando siempre territorio, en una tarea agotadora. En el ámbito político —valga la asociación de ideas— una vez testado el choque de cornamentas, lo que está difícil es amancebarse cuando unos y otros están marcados a fuego. Será al calor de la cueva en forma de urna la que dicte quiénes son los elegidos. Mientras tanto, y por si no quedaba claro, la coordinadora de Podemos Andalucía, Teresa Rodríguez, apuntaba —como si fuera la experta en comportamiento animal de primates Jane Goodall — que “la testosterona” de Iglesias y Errejón es la que impide ir con una marca común. A este paso el asalto al cielo electoral habrá que subcontratarlo. Economía política. Razón lleva Rodríguez y, salvo porque usamos taparrabos, tampoco hay diferencias notables con nuestros primos monos. Pedro Sánchez, presidente en funciones y césar del socialismo patrio, acudirá el próximo martes a Jaén con motivo de los actos por la efeméride de los 100 años del PSOE en la provincia. Vendrá, marcará también territorio y lo hará —quién lo iba a decir— en coche oficial, que el maltrecho peugot con el que reconquistó a la militancia estará para el desguace. De carreteras furtivas a pasar Despeñaperros en olor de multitud. El amor, ahora, es correspondido, de momento.

Mientras el PP en la provincia anda buscando una firma de autor —tras aquel enfrentamiento interno que deparó una diáspora de alcaldes y cargos, aquella rebelión del patuco frente a la oficialidad de lustrosos zapatos— Miguel Moreno (otrora líder rebelde y alcalde popular de Porcuna) ha pasado a convertirse en referencia de Ciudadanos (Cs). En aquel “cruento” enfrentamiento se escenificaron dos maneras de entender el PP provincial, una más pegada a los pueblos y a los resultados electorales y otra más orgánica y, si se quiere, capitalina. Pues, “mutatis mutandis”, Moreno será ahora el responsable de dirigir y coordinar la campaña electoral de la formación naranja en la provincia de Jaén para estos nuevos comicios generales del próximo 10 de noviembre. Designación de la ejecutiva nacional que confía en este “patuco” victorioso. De aquel combativo grupo, otros tantos abandonaron la cruzada y retomaron la senda del partido con buena fortuna a la postre, entre ellos el actual delegado de Fomento de la Junta de Andalucía, Jesús Estrella, o el alcalde de Alcalá la Real, Marino Aguilera.

Trump. Aranceles para

complicar la campaña

No deja de resultar paradójico que por culpa de la producción del Airbus —expresión de alta tecnología y producción europea en buena comunidad— Jaén sea víctima propicia y colateral de una guerra comercial que solo acaba de enseñar los dientes, como las hienas. De un plumazo, antes de que cante otra vez el gallo trumpiano, el aceite de oliva tendrá unos aranceles del 25% que, de algún modo, habría que repercutir en el precio. Una verdadera alegría por ejemplo para nuestros vecinos italianos a los que se despejaría, de nuevo, el horizonte comercial. “Avanti”. Un efecto mariposa que viene a tocar el fruto de unos olivareros que tienen motivos suficientes para preguntarse si sufren mal de ojo esta campaña. Bien es sabido que las cornamentas crecen con el tiempo, y según las veleidades del sujeto, se retuercen de ahí la conocida expresión. Ahora nos toca estar con los cuernos retorcidos.

cs. De la rebelión del patuco al oráculo naranja