Una nueva movilidad urbana

La movilidad urbana de la capital es una asignatura pendiente de todos los gobiernos que han pasado por el Ayuntamiento de Jaén. La complicada orografía de la ciudad hace que cada vez sea más difícil circular en vehículo por las calles, lo que da lugar a improvisaciones que enervan a los conductores, por lo que es necesario una respuesta urgente para que la situación de caos y de colas en los semáforos no se prolongue en el tiempo. El equipo de Gobierno quiere coger el toro por los cuernos y, además de dar la oportunidad a otra empresa para que gestione el único transporte público operativo que existe, el de los autobuses, su intención es remodelar el tráfico contando con el tranvía como punto de referencia en torno al que se modelará el resto. Siete empresas están interesadas, por el momento, en el contrato con el que se diseñará el mapa del tráfico jiennense del que formará parte esencial la peatonalización, el tranvía, el nuevo servicio de transporte de autobús urbano, la red de aparcamientos disuasorios existentes y otros en proyecto, otros servicios públicos y los vehículos de movilidad personal, como patinetes y bicis eléctricas, entre otros. Una consultora se encargará de realizar encuestas a pie de calle para que los vecinos aporten sus propuestas con vistas a mejorar el servicio de transporte de autobús, un trabajo que será el germen de un proceso participativo más amplio que, a su vez, será la base del pliego de licitación del sistema al completo. Escuchar a la gente es importante, pero más operativo oír las opiniones de los expertos, sobre todo a la hora de poner en funcionamiento el tranvía, porque no es lo mismo que circulen dos trenes a que lo hagan cuatro. Ahí está la clave del éxito.