Reconocimiento merecido

El Ayuntamiento de Jaén entregó el pasado martes la Medalla de Oro de la ciudad a Alejandro Jaén, así como lo nombró Hijo Adoptivo de la capital. Su amplísima trayectoria, marcada por numerosos logros como productor, compositor, cantante y escritor, lo hacen merecedor de tal reconocimiento. Solo baste decir que cuenta con 50 discos de oro y platino por las ventas de 50 millones de copias, además de haber compuesto más de un millar de canciones. Sorprendentemente, a pesar de una amplísima carrera, se trataba de una persona desconocida para la gran mayoría de los jiennenses. Por fortuna, el reconocimiento permite dar a conocer una trayectoria marcada por el esfuerzo y el trabajo, algo que sí había sido reconocido en otros muchos lugares del mundo, pero que en Jaén, a pesar de tratarse de la provincia que lo vio nacer y en la que transcurrieron su infancia y juventud, no se había dado. Enorgullece, aún más, saber que lleva a su tierra por bandera, de la que presume allá por donde va. Quienes lo rodean y quienes han trabajado con él subrayan el continuo amor por Jaén y aprovecha para hablar de ella siempre que tiene la oportunidad, como un auténtico embajador.

No es la primera ocasión en que el Ayuntamiento de Jaén saca del olvido a un jiennense ilustre, como ocurrió en su momento con el médico judío Hasday ibn Shaprut, con el que precisamente esta semana se ha dado a conocer la puesta en marcha de un galardón internacional que llevará su nombre y que reconocerá el trabajo por la paz y la concordia. A diferencia de este ilustre médico nacido en el siglo X, Alejandro Jaén ha tenido la fortuna de recibir el reconocimiento de sus paisanos cuando aún tiene mucha carrera por delante.