Llegan tormentas con daños

Una depresión aislada a niveles altos, conocida como DANA, sorprende a los jiennenses con chubascos, en algunos casos fuertes, que traen la esperada agua que necesitan los pantanos y, sin embargo, dañan los ya de por sí afectados campos por la falta de precipitaciones. La zona sur de la provincia empezó a registrar las primeras precipitaciones al filo de las seis de la tarde de ayer, fundamentalmente en Valdepeñas de Jaén, Alcalá la Real, Fuensanta de Martos y Los Villares, donde incluso el granizo hizo acto de presencia con demasiada virulencia sobre el olivar. La Agencia Estatal de Meteorología tiene activado el nivel amarillo y permanecerá el riesgo durante un fin de semana en el que se esperan trombas en lugares variopintos de una tierra en la que hace falta la lluvia como agua de mayo. Hay que tener en cuenta que la mayor parte de los jiennenses viven del monocultivo del olivar y, después de una de las peores cosechas de aceituna de la historia, toda la carne está puesta en el asador de la próxima. Sin embargo, desgraciadamente, no hay que ser experto para darse cuenta de que la próxima temporada de producción de aceite de oliva tampoco será muy halagüeña. Sólo se salvarán los olivares de regadío, siempre y cuando la llegada de tormentas como las que se esperan este fin de semana no haga el daño que se prevé. Los efectos del cambio climático se notan desde hace años y, a medida que pasa el tiempo, atacan con mayor virulencia, sobre todo en el sur de España, lo que hace pensar en la urgencia de un cambio de modelo productivo para que la economía no dependa, de forma casi exclusiva, del campo. La inversión en infraestructuras hidráulicas es una obligación para las administraciones.