En busca de ayuda financiera

La situación económica del Ayuntamiento de la capital es de quiebra técnica, según se ha reiterado por activa y por pasiva por el equipo de gobierno desde que se hizo cargo hace más de cinco años de la Alcaldía. El discurso de las arcas vacías ha sido constante, con una deuda que puede rondar los setecientos millones de euros, según cálculos de la oposición municipal. Con ese importante hándicap, no sorprende que la primerísima tarea que se ha marcado el flamante alcalde Javier Márquez sea llamar a la puerta de las administraciones públicas en busca de soluciones financieras para poder sostener todos los servicios que hasta ahora se ofrecen desde el Ayuntamiento, amén de los puestos de trabajo que dependen directamente de la teta del Consistorio de la capital, con alrededor de mil quinientas personas en nómina. Tal y como anunció en el discurso de su reciente toma de posesión, Márquez llamará a todas las puertas, con independencia del color del partido que esté al frente de esa institución. El primero de los encuentros, con dos secretarios generales en Madrid, sirvió para reforzar la buena sintonía de la que se ha hecho gala en estos últimos años. Lo complicado será, a priori, esperar esa misma colaboración abierta y directa de otras administraciones con las que, hasta ahora, no se ha producido entendimiento alguno, sino todo lo contrario. Es el caso de la Junta, por ejemplo, después de que el anterior alcalde dejase el cargo sin haber logrado una reunión con la presidenta.

En el actual escenario de campaña electoral, al margen de interpretaciones políticas, es de esperar que la filosofía de mano tendida del nuevo alcalde dé sus frutos, por el bien del ciudadano jiennense.