El Brexit de los agricultores

La salida del Reino Unido de la Unión Europea es un problema que afecta directamente a los jiennenses, una provincia con gran dependencia económica del olivar. Son muchos los empresarios que, en la búsqueda de la conquista de nuevos mercados, lograron entrar en el británico y, ahora, se ven abocados a afrontar un Brexit que ya resulta imparable. Se trata de un nuevo obstáculo, muy importante, que habrá que sortear de la mejor manera posible, porque son millonarias las exportaciones y muy difícil el camino recorrido para que, a la primera de cambio, los esfuerzos caigan en saco roto. Las organizaciones agrarias, de forma conjunta con los representantes de las administraciones públicas, están llamados a hacer fuerza para lograr la exención de aranceles en los acuerdos comerciales que están a punto de ser aprobados tanto en el Parlamento Europeo como en el británico. Hay que tener en cuenta que el flujo anual de los productos agroalimentarios que vende España en el Reino Unido, cada año, supera los cuatro millones de euros. Hay mucho dinero en juego, que se traduce en presente y futuro de un buen puñado de empresarios olivareros que no lo tuvieron nada fácil para acceder al mercado internacional y que, ahora, desconocen si perderán por culpa de impuestos que pueden llegar a superar el cuarenta por ciento. Es una prioridad cerrar, cuanto antes, los acuerdos comerciales para evitar un caos en la frontera, evitar la falta de suministro para los consumidores y, sobre todo, frenar la sangría de la pérdida de puestos de trabajo que están en riesgo. Una obligación para las administraciones es proporcionar los recursos humanos, técnicos y financieros para cumplir y aplicar las normas aduaneras.