Cita crucial con las urnas
Los catalanes tienen hoy la palabra para expresar democráticamente en las urnas a quién confían el mando de su comunidad autónoma. Las diferentes encuestas publicadas sobre la crucial cita electoral tienen un denominador común. Todas, sin excepción, reflejan la profunda brecha heredada del proceso independentista. Cataluña, su población, está absolutamente dividida, lo que supone, cuando menos, una situación muy compleja para el gobierno saliente de esta jornada electoral, sea quien sea el que salga victorioso de las urnas. Salvo sorpresas de última hora y que las encuestas se hayan equivocado, la ausencia de una gran mayoría dificultará el retorno a la ansiada normalidad después de lo acontecido en este año. La jornada de hoy conllevará, asimismo, el fin de la aplicación del artículo 155 de la Constitución, medida que fue adoptada tras la declaración de independencia, esa de la que algunos dirigentes han renegado con el único fin de salir de prisión por saltarse la ley de manera flagrante e irresponsable, lo que tuvo unas consecuencias fatales.
Sea cual fuere el resultado de las urnas, los líderes independentistas deberían haber aprendido la lección y evitar, en el futuro, continuar en la senda por la que de manera tan desafortunada y antidemocrática procedieron. También toda esta situación debe haber servido para que el Gobierno central entienda que posiciones inmovilistas, en las que no hay posibilidad alguna de diálogo, también pueden tener serios costes, como todo lo acontecido en los últimos tiempos. Es momento de recomponer lo que, guiados por la sinrazón de unos otros, quedó hecho añicos y tanto va a costar restituir. Será necesaria la generosidad de todas las partes.