Alerta sanitaria en Andalucía

    21 ago 2019 / 11:13 H.

    El 15 de agosto se decretó una alerta sanitaria en Andalucía por intoxicación en la ingesta de carne mechada contaminada de Magrudis. Ya son más de cien los casos detectados, una mujer fallecida y empiezan a registrarse nuevos en Extremadura, Madrid y Gerona. Todo hace indicar que estamos en pleno brote, porque los expertos señalan que el periodo de incubación es de un mes. Es, además, el mayor de todos los contabilizados por listeriosis en Europa. Ante las críticas por el retraso del Gobierno andaluz en el encendido de las alarmas, es importante destacar que la Consejería de Salud no pudo activar la alerta alimentaria hasta que no tuvo confirmación oficial de la marca del producto, La Mechá, fabricada en Sevilla. Eso sí, mucho antes los hospitales y los centros de Atención Primaria ya estaban avisados. Sí faltó, desde un primer momento, una participación proactiva de la empresa para informar a los consumidores finales. Todo hace indicar que el sistema público de salud está funcionando: los afectados están siendo atendidos, reciben un tratamiento antibiótico y aquellos casos más graves son hospitalizados. Lo que no es de recibo es que los representantes políticos realizaran declaraciones apresuradas que indicaban que los casos irían desapareciendo. Falló la prudencia política en un asunto de enorme calado social que, una vez más, se convierte en una excusa para la confrontación entre dirigentes de diferentes partidos. Es el momento de demostrar el sentido de la responsabilidad que tienen quienes representan al pueblo y, en lugar de atacar a otras administraciones en búsqueda de culpables, urge una explicación pública en el órgano pertinente a toda la población.