Los sueños de Pedro Sánchez
Nuestro recién investido presidente ya vive en su idílico paraíso de 4 años en la Moncloa salvo imprevistos, esta investidura conseguida con 6 0 7 escaños de margen, gracias a unos cuantos pactos, a cambio de unos “pequeños detalles cedidos” a los insaciables separatistas. Y que por el momento le ha proporcionado una tranquilidad en las autonomías que no desean ser españoles, aunque un cierto malestar en el resto del país. Hoy por ello su vida transcurre por un camino de rosas, pero hay un pequeño “grano” que le incomoda, y es cuando posa para la prensa junto a sus ministras y el Rey, al contemplar las fotografías, siente una desazón hiriente, porque resulta que el monarca destaca por ser más alto y más guapo que él, y este inconveniente le atormenta hasta que deba de considerar la conveniencia de eliminar la monarquía, la solución de un referéndum nacional, no le convence porque existe la posibilidad de que haya más partidarios de la monarquía que republicanos, y este riesgo no quiere asumirlo, por lo que considerará el proponer en el parlamento un decreto ley para derrocar la monarquía parlamentaria, en cuyo caso el ocuparía el protagonismo absoluto, para lo que propondría un nuevo título para su cargo, o emperador, o sultán, zar o incluso ayatola, exigiendo un trato de divinidad más acorde que majestad que se emplea en las monarquías tradicionales.
En lo referente a Yolanda Díaz, una de sus principales valedoras, que le faltó tiempo para acudir a Puigdemont para besarlo y halagar su elevado ego, que podría haberse ahorrado el transporte usando su escoba, pero a lo mejor espera más reconocimiento, por sus gestos “consentidos” hacia el prófugo. Creo de todas formas que el “divino” Pedro, ha cometido un solo error en su en su envidiable trayectoria, que pienso que los “detalles” cedidos a las autonomías separatistas, podría habérselos ahorrado y que en algún momento le pueden traer problemas, cuando las exigencias sean de tal magnitud que si no cede, le amenacen con el retiro de los apoyos, y en esto lo tiene fácil para solucionarlo, basta con que amenace o ¡Pedro o la derecha! O sea ¡el gobierno progresista y democrático del gran Pedro o el fascistoide y retrogrado gobierno de la derecha!
EDUARDO LUCAS BUESO / Jaén
Poderoso caballero es don dinero
Alguien dijo que los excrementos tienen que ser deliciosos, porque millones de moscas no pueden estar equivocadas y reconozco, que no pude evitar pensar en la política la primera vez que escuché esa frase. Este es un importante un año electoral, en el que nos tocará elegir a nuestros representantes europeos. Sin embargo hablamos con la gente de nuestro entorno y comprobamos la ausencia de solidez argumental a la hora de declinar su voto en muchos de ellos. Incluso en personas inteligentes, porque demuestran serlo en sus profesiones o en cuestiones en las que han profundizado dedicando tiempo, recabando información de calidad y con esfuerzo. Y este no es el caso de cuando tienen que decidir su voto. El resultado es que la mayoría de nosotros, decidimos el voto de forma superficial, influenciada o visceral y como consecuencia de la suma de todos esos votos florecen nuestros representantes políticos. Y sin embargo esto funciona. Evidentemente podrían mejorarse escuelas, hospitales, seguridad ciudadana, infraestructuras y todo en general, pero honestamente tenemos que reconocer que nuestra actual sociedad esta lejos de ser un caos que lleve a la desesperación a la gran mayoría de los ciudadanos.
El sistema funciona porque la economía funciona. Y la economía funciona probablemente porque no somos nosotros los que llevamos el volante de ese coche. Es como cuando un niño pequeño se monta en el coche de su papa con su volantito de juguete y juega a conducir el coche que en realidad conduce su padre. Con nuestro volantito decidimos si apoyamos a los homosexuales, a las feministas, o cualquier tema de interés social que no afecte demasiado a la economía. Y de esta manera haremos que gane un partido u otro. Pero es “Don Dinero” el que marca su decisiva influencia en nuestros políticos y por ende en nuestros destinos, no sé si por desgracia o por suerte, porque la verdad es que, por ejemplo, la Europa de los veintisiete nunca había conocido un periodo de paz tan prolongado entre los países que la componemos. En la Unión Europea compartimos bancos, macroempresas y grandes tenedores de fortuna y esta es la clave para que los conflictos armados, entre nosotros, ya no resulten económicamente rentables para ningún país miembro. La pacificación de nuestra eurozona se traduce en una calidad de vida, que es la envidia de gran parte del planeta y es que para el “Poderoso caballero” no había nada personal, era simplemente dinero.
MIGUEL ÁNGEL CASTRO / Madrid
Independentistas que actúan como escorpiones
En la fábula de Esopo, la rana accede a llevar al escorpión a la otra orilla, advirtiéndole que, si le pica, ambos morirán. Él le pica en mitad del río, declarando que eso lo que le pide su naturaleza. Al aprobar Junts y la CUP en el Parlament una iniciativa de ley para declarar la independencia, cuando ya los votantes a favor de ella son la mitad que en 2017 —apenas un millón—, muestran también su tan estúpida como perversa naturaleza, pues propician la llegada de un gobierno central mucho contrario aún a sus ideales.
MARTÍN SAGRERA / Madrid