Wonderful tonight

La noche del sábado, en el Auditorio de la Alameda, fue, como cantaría Eric Clapton, una noche maravillosa. Los que pensamos que las mejores canciones de la historia de la música se hicieron en clave de rock en la segunda mitad del siglo XX pudimos disfrutar de un concierto asombroso. Jaén tiene muchos motivos para lamentarse, reivindicarse y exigir, pero ese victimismo con tantos argumentos lo dejamos aparcado cuando se encienden las luces y aparece la banda Apache en el escenario. Nos sentimos henchidos de orgullo local al saber que en el panorama musical nacional contamos con la mejor banda de versiones de rock and roll. Es un privilegio escuchar, sentir y vivir en directo las canciones más legendarias, las que marcaron una generación, en una sola noche, en un enclave extraordinario, con la catedral de fondo, iluminando una noche con un clima perfecto. En esta ocasión, a los de Apache los acompañaban un buen grupo de amigos. Presentados por el gran David Navarro, la banda se disponía entorno a la “JOSE” (Joven Orquesta del Sur de España), con arreglos sinfónicos que hacían la velada más especial. La primera versión de Pink Floyd, sublime, animó al público. Más tarde, una de las mejores canciones de la historia, de lírica a rock “ “Stairway you Heaven”, de Led Zeppelin. De repente, apareció Miss Sarajevo. La canción de U2, con Luismi haciendo de Bono y Miguel Ángel Ruiz de Pavarotti, provocó el éxtasis total. La banda irlandesa sonó de nuevo con “One”, acompañado por la dulce voz de Mar Blanco. En el aire fluían melodías impulsadas por la suave brisa de voces de la Jaén Jazzy. Tras interpretar versiones de The Eagles, Kansas, Rem y Metálica, la noche se hizo perfecta cuando cantaron Pedro Lucas y Laura Baños. Las más de dos horas pasaron volando y dieron paso al momento emotivo de la noche con el recuerdo de las míticas canciones de Apache de los ochenta con los miembros originales de la banda en el escenario. El broche vino con tonos divinos a lo Dylan, llamando a las puertas del cielo “knock, knock, knockin’on Heaven’s door”.