Una perspectiva halagüeña
Contengamos la respiración y pensemos por un momento que el desarrollo tecnológico a gran escala en Andalucía es factible si ningún protagonista se sale del guion establecido. Enterremos el pasado y confiemos por una vez en que los idus de marzo auguren la llegada de signos favorables que transformen esta tierra en un modelo de virtudes empresariales que gocen de un potencial ilimitado. Apartemos las pulsiones negativas y los deseos insatisfechos y abrámonos a un futuro prometedor para el conjunto de las provincias andaluzas, que seguramente se convertirán en una referencia mundial al unir valores como Naturaleza, Cultura y Desarrollo Tecnológico. Dispuestos como estamos a recopilar en nuestro haber acontecimientos que marquen la frontera entre el subdesarrollo y el desarrollo motor de Andalucía, aunemos esfuerzos para dejar atrás los agravios sufridos por una provincia agobiada por el factor de la despoblación y la desconexión en materia de infraestructuras. La instalación en el Parque Empresarial “Nuevo Jaén” del Centro Tecnológico de Desarrollo y Experimentación del Ministerio de Defensa (Cetedex), facilitará la implantación de nuevas empresas asociadas a su estructura organizativa. Ni que decir tiene que este proyecto no representa sino una mínima parte de la deuda que el Estado tiene contraída con Jaén y su provincia.
Descabalgada Jaén en su día, Córdoba ubicará la base del llamado plan Colce, o lo que es lo mismo, la puesta en marcha de una base logística del Ejército de Tierra. Granada cuenta con un proyecto fundamental para construir el primer reactor de fusión comercial, su nombre es: Acelerador de partículas (Imfif-Dones) que se construirá en Escúzar, dentro del área metropolitana de la capital. La candidatura de la Universidad de Granada para albergar la Agencia de Supervisión de la Inteligencia Artificial, por ahora, se fue para A Coruña. La larga experiencia aeroespacial, le va a servir a Sevilla para convertirse en la NASA española. Decisivo será el papel que juegue en temas esenciales como la Ciencia, la Industria y la Geopolítica. Se convertirá en referencia del sector aeroespacial en cuestiones como la Investigación y el Desarrollo Tecnológico. La Ley de la Ciencia, la Tecnología y la Innovación, contempla, desde junio de este año, la creación y puesta en marcha de una entidad que será una herramienta imprescindible para las comunicaciones y la Seguridad.
Encargos realizados por varios países a Navantia para construir en los astilleros de Cádiz diez embarcaciones. La inversión que Cepsa va a realizar en la provincia gaditana para impulsar el desarrollo del “Valle Andaluz del Hidrógeno Verde”. La elaboración de combustible verde en San Roque y el apoyo de la naviera Maersk en colaboración con Cepsa permitirá ramificarlo hasta el Parque energético de La Rábida y Palos de la Frontera. La línea de alta velocidad que conectará Murcia con Almería. Los millones que van a invertirse para regenerar (estado de los acuíferos, plan de regadíos, depuración de aguas vertidas en Doñana, etcétera) el espacio natural de Doñana, más las diez zonas integrantes del expediente: “Paisaje del Olivar de Andalucía, harán del olivo el símbolo universal de la cultura mediterránea. Pronto será reconocido por la Unesco como Patrimonio Mundial. Convertir Andalucía en una comunidad moderna, se me antoja, como mínimo, una labor encomiable.