Una charla con Pedro Fernández

    09 ago 2019 / 10:33 H.

    Se llama Pedro Fernández y cuando nació, el Dios Apolo le tocó el alma con el arte de la música. Vive en Mancha Real y permanece encerrado en su casa, su sanctasanctórum privado, creando música y dando rienda suelta a su imaginación. No llena estadios, no suena en los grandes festivales, y pocas personas le conocen, pero vive para la música, nunca se rinde y su ilusión sigue intacta a pesar de llevar más de cuarenta años entre guitarras, teclados y partituras a las que le pone alas y que podemos escuchar en algunas emisoras locales que apuestan por la música con alma y entrevistas en radio y televisión que sobreviven a duras penas en el poco espacio que les deja las grandes discográficas. Se llama Pedro y su mirada huele a “puedo”, habla de la música con la pasión del que la acaba de descubrir, su lealtad le hace grande y su música lo confirma. Se llama Pedro Fernández y es mi amigo. Quizás algún día alguien influyente, camuflado al fondo del garito, escuche Radio Tarsus de Úbeda, Radio M7 de Córdoba y Onda Libre en La Iruela, (espacio donde Pedro expone semanalmente) y le ofrezca la oportunidad que se merece, que no es otra que poder vivir de lo que le da la vida: “La música.”