Un pueblo con arte

08 ago 2017 / 10:27 H.

Santisteban del Puerto entró en mí hace muchos años. Mi inolvidable amigo, Francisco Olivares, un santistebeño ilustre a quien el amor y la devoción por su tierra le brotaba por todos los poros de su cuerpo, no desaprovechaba ocasión para hablarme del municipio y de sus gentes. Fallecido aquel entrañable amigo, entró en liza otro santistebeño irrenunciable, como es Juanjo Armijo, que tomó el testigo y me tiene bien informado de cuantas cosas de interés, que son muchas, suceden en Santisteban. Él lleva también en sus venas algún que otro venero de artista y vive con entusiasmo todo ese arte que atesora su pueblo, con una historia plena de grandes hechos y de ilustres personajes. Santisteban rezuma arte en sus portadas blasonadas, rejerías, torreones y murallas. Allí está el Museo de Jacinto Higueras, el Museo Arqueológico y el de la Virgen del Collado, prueba de la vocación cultural que se profesa desde siempre.

Ahora, mi amigo Juanjo, me habla de una pintora cuya obra está despuntando considerablemente. Ella es Loli Álvarez Pérez, una mujer nacida en Santisteban, que lleva muchos años pintando, llevada de su irreprimible vocación. Una artista totalmente autodidacta que expresa todo lo bello de su tierra en sus cuadros. Actualmente mantiene abierta una exposición en la que exhibe más de 30 cuadros que recrean la vida de los santistebeños. Bodegones, flores, paisajes y escenas costumbristas en las que no faltan las referidas a las populares y famosas fiestas de la Virgen. La muestra está abierta en el salón de actos del Ayuntamiento de Santisteban hasta mediados de este mes, coincidiendo con las fiestas de agosto.

Loli Álvarez trabaja varias técnicas del arte y de la artesanía, de las que imparte clases particulares, como el óleo, pasta de relieve, espátula, carboncillo, manualidades y reciclaje. Tiene 3 hijos, Francisco, María Ángeles y Enrique y, a sus 51 años, está llena de entusiasmo, de ilusiones y deseos de seguir trabajando para dejar huella de las cosas bonitas de su pueblo, una tierra pródiga en artistas de la pintura, algunos de los cuales ya fueron protagonistas de esta “brisa”, siempre abierta a las cosas de Jaén y a sus gentes. Y, al margen de su arte, Loli Álvarez está pendiente de un nuevo reto laboral. Dentro de pocos días, abrirá una papelería en el pueblo. Mucha suerte.