Un paseo por Torredonjimeno
Recientemente he asistido en un salón abarrotado de la Casa Municipal de Cultura a la presentación del último libro de Cosme Moreno Bonilla, buen alcalde, escritor y pintor, realizada al alimón con Manolo Hermoso, que es un tesoro de saber tosiriano de su entorno y sus gentes. Es un largo paseo sentimental ilustrado de fotografías y comentarios de calles, plazas, enclaves, usos, costumbres y dichos locales. Ya de anteriores obras suyas de historias, cuentos, juegos, vidas, relatos y divertimentos conocíamos su profunda humanidad, rigor y compromiso social. El libro —agotado y reeditado— es coral; aunque su pluma y su estilo sean únicos recoge una amalgama de testimonios, recuerdos, sucedidos y sentimientos de muchos, de esta manera el espléndido resultado se constituye en la llave y la clave para entender la vida de Torredonjimeno en los últimos cien años. De elegir, me quedo con el paseo de su propia calle, el Norte, donde nació, describe lugares y personas vistos con los ojos del niño que fue y mezcla con maestría enclaves, nombres y apodos que hacen al lector retrotraerse a su propia infancia. Con esta obra Cosme se revela como el gran cronista sentimental de nuestro pueblo.