Ultraactividad
Agosto se está mostrando extremo por su temperatura superando los límites conocidos desde que hay referencias; no tanto por sus valores, sino por su persistencia y continuidad de la misma. Los datos se asumen con la normalidad de quien escucha que se ha apresado el mayor alijo de sustancias ilegales hasta el momento. A pie de calle “sentimos que la cosa esta caliente”, existen pocas posibilidades de controlar esta parte de nuestra vida cotidiana. Da la sensación de que el acuerdo de convivencia entre naturaleza y persona está superado, aunque creamos que la relación con ella sigue siendo la misma. Reclama un nuevo convenio. Por nuestra parte seguimos como si no pasase nada. Está roto, está activo por ultraactividad. La palabra hace referencia a la consideración de las cláusulas de un acuerdo hasta la elaboración de uno nuevo, aunque carezca de vigencia, convirtiéndose en inútil para sus legítimos fines.
El mes encierra más situaciones que confluyen en esta misma realidad de ultraactividad. Agosto es el mes de la juventud. Un momento del calendario para obligarnos a exponer datos y presentar investigaciones analíticas sobre la juventud. Todos los resultados coinciden en que el acuerdo entre generaciones está roto. Existe por inercia a la espera de que lo actualicemos. La democracia tendrá valor si da respuestas a la ciudadanía que acoge. Las personas se implican y participan si encuentran que sus necesidades y un modo de ver las relaciones están contempladas. Los partidos políticos, como responsables de mantener vivo el acuerdo social, deben prestar atención a las políticas que realmente llegan donde “la cosa esta caliente” y no perderse en los intereses por vender ideas para fidelizar clientela que les compre su programa, buscando solo el minuto de oro en los medios de comunicación y el impacto en redes. Isabel, una joven de ojos vivos, exhibe un tatuaje con una frase en ingles en la que puede leerse “todo se puede superar”. Se expresa de forma clara: “¿Qué espero? Que se nos escuche y comprenda lo que decimos. Que dejen de pensar que no tenemos claras las ideas. Como mujeres, reivindicamos igualdad y equidad de derechos. Sinceridad en la sororidad del resto de mujeres, que dejen de hablar por nosotras sin saber que significan estas palabras, hablando desde la sumisión y el postureo de los derechos de la mujer”. José, con mirada amable y sonrisa acogedora, muestra su estética como forma de expresar su libertad.
Dos muestras del vitalismo de la juventud por tener espacio y no ser objetos de explotación consumista. Audrey Azoulay, desde la Unesco, planteó a la sociedad que se actúe en apoyo de los jóvenes y se escuche sus opiniones, dar medios para dar forma a sus sueños crea un futuro mejor para todos. No les deseemos suerte para su emancipación, como si fuese una situación incontrolable. Coincidirán con Séneca que “la suerte es lo que ocurre cuando la preparación coincide con la oportunidad”. Para ello debemos revisar el acuerdo, darles credibilidad, escucharles alejándonos del paternalismo y la exigencia de que han de asumir y heredar nuestra sociedad actual para darle continuidad. Es el modo de favorecer su preparación y promover oportunidades; éstas no crecen en los árboles, son las personas las que las construyen y no la inercia social que responsabiliza la juventud de no encontrarlas.