¡Uf! Qué calor

Será que ya no nos acordamos del calor del verano pasado que también lo hizo, aunque ciertamente este año vence récords por las altas temperaturas que no dan tregua ni resguardándose en la sombra. Lo peor es que este bochorno se mantiene igual durante la noche, y es insoportable dar vueltas y vueltas en la cama empapado en sudor, darte una ducha de agua fría que no alivia... Y cambiando de tema, aunque en la misma línea, decir que existen estudios que avalan la tesis de que el calor aumenta la criminalidad y eso lo estamos viendo estos días en personas cuyas neuronas parecen derretirse por las altas temperaturas convirtiéndolos en asesinos sin escrúpulos de niños, sus propios hijos, y de sus parejas o ex parejas que en muchos casos han dado la vida a estos menores a quién alguien sin escrúpulos se la arrebata, otros igual de cobardes sienten remordimientos tardíos y también se quitan la vida. Muchos, y yo con ellos, nos hacemos la misma pregunta: ¿Por qué no lo hacen ellos primero?, ¿Qué culpa tienen estas criaturas de conflictos de pareja para perder la vida tan cruelmente? En fin, reflexiones sobre el calor del verano, y me voy a mi barrio que allí hace más fresquito.