Talento made in Jaén

    13 abr 2023 / 09:00 H.
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    Emprender es una visión del mundo, lo he dicho ya y me repito, es importante dejar claro que no existe una receta única ni es posible fijar una ruta común. Requiere aprender a lidiar con nuestro autoconocimiento, nuestra perspectiva del mundo, nuestras fortalezas y miedos, y atreverse, ponerse en marcha; cuando caminas, solo el siguiente paso te dirá si el anterior fue acertado o no. Esto es lo que la experiencia me dice, pero también soy consciente de que son demasiados “nuestros” personales, en realidad nadie camina solo, y menos si espera llegar lejos. A menudo pecamos de cierto adanismo, de individualismo injustificado, cuando ponemos foco en el emprendimiento. Me considero un emprendedor perenne y el desarrollo de muchos de aquellos proyectos me han convertido en empresario, pero siempre busco reiniciar nuevos caminos diversos, y si algo me dice la experiencia es sobre la necesidad de no caminar en soledad, de tener acompañamientos solventes, encontrar foros en los que compartir y multiplicar experiencias. El emprendimiento no está exento de riesgo, a los temas financieros debemos sumar las dosis de paciencia, creatividad, visión, liderazgo, confianza en uno mismo. Nos hemos acostumbrado a dirigir foco solo a las competencias y habilidades técnicas de la persona que emprende, y a resumir todo en éxito o fracaso. Hay que apostar por un modelo de emprendimiento más humano, en el que compaginar el conocerse a uno mismo con el sentido que uno tiene con los otros, es decir, con el contexto, con la comunidad. Sabemos que la intuición y el sentido común son claves y eso nos conecta mucho con los otros. Introduzco aquí el talento. Con esta aptitud o capacidad especial para desempeñar una actividad nos ocurre algo parecido, lo enfocamos vinculado a la inteligencia, pero tendemos a ignorar el aspecto emocional que lo acompaña, lo asociamos a cierta habilidad innata y a la creación, perdiendo de vista toda la influencia del contexto y de lo permeables que somos. El emprendimiento, el talento... crecen exponencialmente en contextos que se comparten y retroalimentan, donde se crea un terreno abonado para fomentarlos, donde se protegen y difunden, en el que se crean foros para compartir experiencias. Este es el reto, y debemos estar especialmente contentos por el anuncio de una Incubadora para emprendedores en Geolit, y por el desarrollo de jornadas como Jaén Talents durante estos días. El talento de Jaén tiene cada día más foros en los que crecer y compartirse.

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