Sospechoso de spam

    14 dic 2023 / 09:58 H.
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    Tampoco sé inglés. En mis tiempos se estudiaba francés, más o menos. Esto puede explicar, en parte, la torpeza de muchos mayores en las llamadas “nuevas tecnologías”. Cartelitos por aquí y por allá que hay que leer y releer sin que nos enteremos demasiado. Se dice que los textos originales son chinos, que luego se traducen al inglés y más tarde al español. El resultado ya se sabe: un refrito gramatical que no hay quien lo entienda, al que hay que añadir el correspondiente vocabulario nemotécnico.

    Exaspera lo de “sospechoso de spam” en nuestros móviles, cada dos por tres. “No lo abras, papá”. “Ten cuidado que te timan, abuelo”. “Cuando leas esto no le hagas ni caso”. “Pues a Fulano le dieron un buen susto al cogerle el número de cuenta”. Total, una serie de lindas amenazas que nos tienen tensionados y amedrentados.

    La curiosidad me ha llevado a buscar el significado de la palabra “spam”. Y gracias a mi amigo y compañero Ricardo San Martín —un “teacher” jubilado, que vino de las Merindades burgalesas y se hizo alcalaíno por decisión y devoción—, he sabido de nuestra pesquisa. Como me presentía, la palabreja en un acrónimo. Procede de “spiced ham” (jamón con especias); pero este “jamón” no es el nuestro, sino la carne de almuerzo o jamonada. Fue después de la Segunda Guerra Mundial y en el Reino Unido cuando empezó a conocerse con el acrónimo mencionado (Special Processed Americam Meat), o sea, carne americana especialmente procesada. Hay, incluso, latas con esta marca.

    Por el momento, todo bien. Vino, más tarde, lo despreciativo, lo humillante. Parece que el sabor del producto degeneró. Una vez más sucede lo de los préstamos semánticos. El término spam se interpretó como porquería, como roña. En 1994 ya se aplicó a la mensajería. Un programador lo empleó en Usenet, relacionándolo con el programa Monty Python Slam. Había llegado el contagio y el ecumenismo. Y, hasta ahora.

    Los más avispados tienen la respuesta. Cuando veas lo de “sospechoso de spam”, no te amilanes. Coges y le aprietas a la tecla tal y allí te salen varias opciones. Una de ellas dice “bloquear”. Le das y ya está. Pues muchas gracias y “bye bye”.

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