Sequía extraordinaria

La Confederación Hidrográfica del Guadalquivir ha declarado la situación excepcional por sequía extraordinaria en el 80 por ciento de la cuenca y afecta a las provincias de Sevilla, Córdoba, Granada y Jaén. La escasez de agua no pone en riesgo el consumo humano, garantizado para dos años, pero sí el de la agricultura. Es algo que se veía venir por la falta de precipitaciones de este año y los anteriores. En la cuenca del Guadalquivir el año hidrológico que finalizó en septiembre y empieza en octubre contaba con un 17 por ciento menos de precipitaciones que la media de los últimos 25 años, acumulando la cuenca ahora el 20 por ciento de su capacidad habitual. El olivar es fiel reflejo de esta situación en su estado vegetativo, con síntomas de estrés hídrico y evidenciado en un menor tamaño del fruto, sobre todo en el secano, dando lugar a una menor producción y cantidad de aceite. El cambio climático nos está afectando de lleno, cada vez menos lluvias, lejos de los que sucedía años antes. Ni que decir tiene, que esto se traduce también en la necesidad de más responsabilidad, en el gasto de agua en nuestros hogares.