Señor obispo, ponga paz. ¡Y orden!

Viene labrándose un enfrentamiento entre la Cofradía y los frailes del Santuario de la Virgen de la Cabeza, entre la junta directiva y el Obispado que no huele a final pío >> Hasta con un “Sálvame” nos abochornaríamos de lo que se dicen unos y otros

13 dic 2015 / 15:21 H.

No sale uno de su asombro, de todo corazón que no. Asombrado y estupefacto de ver cómo gente pía, de confesión diaria, aseada en las formas y derrochona en golpes de pecho es capaz de hacer lo que hace. Será que en todos lados cuecen habas, pero que la gran familia que arropa y acompaña a una venerada imagen aparezca como verdulera es, quizá, solo quizá (no se me enfade todo el mundo) el botón de muestra más palpable de la crisis de valores en la que estamos. Cuando a la Virgen santísima adoramos, a Dios con el mazo damos y cuando a Jesús ensalzamos, es a la propia María a la que arrinconamos y entristecemos. Fuere creencia celestial, sea razón divina, qué dirá “La Morenita” de la pelea entre los padres trinitarios y la Cofradía de la Virgen de la Cabeza, qué pensará la patrona de la Diócesis cuando vea que es por dinero. Gentes de fe y fervor, mujeres y hombres que se lavan a diario de pecados y rezan ensimismados como poseídos por la mano de Dios, aquellas y aquellos que han hecho del culto a la Virgen de la Cabeza algo más que un deber de católicos, apostólicos y romanos, andan a la gresca, de pelea sucia, burda, barriobajera. En público y con las redes sociales como árbitros de quién insulta más, quién pega más fuerte. Y lo más curioso es que nadie, absolutamente nadie, al primer sostrazo pone la segunda mejilla, todo lo contrario, arrea con lo que puede. Más que fieles seguidores de la misa de los domingos en TVE, se asemeja al gallinero del “Sálvame Deluxe”, más que de los cánticos gregorianos y los rezos somníferos de Radio María parece que estás ante una trifulca de adolescentes a la puerta de un instituto... Señor obispo, haga usted algo antes de irse a su tierra, merecido tiene el descanso, le estimamos y consideramos, pero dejarle esa pelea en carne viva al nuevo pastor quizá no esté bien. Más aún después de que la propia Cofradía quiera “inmatricular” el Santuario a su nombre, quedárselo como suyo, vamos. De ser así las cosas, “13Tv”, la tele de los obispos, su tele, tendrá que pagar en la próxima romería. ¡Ay Morenita, cuánto te quieren los que tanto quieren!