Realidades extendidas

    13 jun 2019 / 09:09 H.

    Hace tiempo que la realidad virtual dejó de ser un juego, gracias a otros aspectos tecnológicos tan importantes como el biofeedback. Esta herramienta permite que las aplicaciones informáticas puedan reconocer nuestras constantes biológicas para realizar un seguimiento de las mismas. En el ámbito de la realidad aumentada, el biofeedback se utiliza para prestar apoyo en operaciones reales, ya que los doctores pueden observar todos estos parámetros a través de esas gafas especiales y sin necesidad de apartar la vista del paciente. Así, la pantalla se integra en nuestros ojos de forma ágil y eficiente, algo que en estos casos puede llegar a ser decisivo. Incluso en el sector de la psicología también han surgido distintas aplicaciones capaces de recrear fobias u otros problemas de forma progresiva, como un entrenamiento simulado para que el paciente llegue a controlarlo. También comienzan a darse los primeros entrenamientos digitalizados en todo tipo de sectores, como en el de la soldadura, para que los jóvenes soldadores puedan aprender en un entorno controlado y sin desperdiciar materiales. Por todos estos motivos, los expertos consideran que nos dirigimos hacia una industria 4.0. ¿Estaremos preparados?