Quien avisa...

Quien avisa no es traidor, dice el refranero. Y al tema de la economía me refiero. El crecimiento del PIB español en el primer trimestre fue del 0,5% respecto al último trimestre de 2022, lo que supone un crecimiento interanual del 3,8%. España creció el 5,5% en 2021, el 5,5% en 2022 y la previsión de la OCDE para el cierre de 2023 es de un crecimiento del 2%, o más. Con Alemania y la Eurozona en recesión. O sea, que vamos por buen camino... para todos excepto para Feijóo. No se cansa de repetir donde quiera que va que la economía está estancada. Ha dicho que “entramos en declive económico porque aún no hemos recuperado el PIB de 2019”, añadiendo que “de cada cuatro parados en la UE, uno es español, hemos perdido poder adquisitivo y la renta familiar disponible ha bajado”. Feijóo ha señalado que “el triunfalismo injustificado es un mal diagnóstico” y ha reclamado “realismo”. Este es el aviso, contra toda evidencia y a pesar de los buenos datos económicos: como la economía va mal (aunque no sea cierto), habrá que reducir el gasto (realismo). Es decir, bajarán las pensiones y el gasto social, los trabajos volverán a ser precarios y se gobernará para lo privado y para lo más ricos. Esta es la amenaza velada que calla ladinamente. Luego nos extrañaremos que lo haga.