Pueblo y política

Con las elecciones cercanas, andan unos y otros prometiendo, lanzando ideas, poniéndose en el lugar del pueblo y apostando por la mejor foto. Y el pueblo, en su línea de ignorancia y simpleza, sigue sabiendo de antemano a quien votará. Y es que vivimos en esa España dividida entre gaviotas y claveles mezclada con nuevos partidos abanderados por el morado o con nombre del diccionario; no escuchamos promesas, nos da igual lo que se cumpla porque o eres de derechas o eres rojo. Lo que hace uno lo cierra otro (véase tranvía, parque acuático...). Y nunca pasa nada porque nuestra ideología no nos permite echar a un bando y bajar del pedestal al otro, seguimos viviendo en una sociedad anticuada, ignorante y movida por una política, en su mayoría corrupta, de la que no saldremos hasta que como ciudadanía nos tiremos a la calle y reivindiquemos el poder del pueblo. Defendamos lo nuestro, sancionemos a quienes caliente sillón y no cumplen promesas, dejemos fuera valores y banderas y apostemos por quienes con un aire nuevo hagan de la política una carrera sincera que vive por y para el pueblo, dejando las dietas para el trabajador. Seamos el pueblo que cuide su educación pública, su sanidad pública y demás servicios que van recortando sin darnos cuenta.