Pasión y acción

16 abr 2019 / 16:14 H.

Si algo es la Semana Santa, es un tiempo de reflexión, independientemente del credo de cada persona. Es un momento para sentir, pensar y madurar. Los espacios que alteran lo cotidiano tienen esta característica. No se puede negar su magia. Es un sinfín de percepciones y emociones. Unas personas porque cumplen el deseo que llevan esperando todo el año con el refuerzo que supone el reconocimiento colectivo. Para otras conocer nuevos paisajes, espacios, sensaciones culinarias o simplemente descanso. Hay quien dice que posee una dimensión demagógica en tanto es una actividad que nos hace creer lo que realmente no somos u opinamos. Es el “soma” en el “Mundo feliz” de Aldous Huxley. La sustancia que nos cede ser felices. Demagogia como arte de seducir desde lo que deseas oír. El arte de persuadir desde la distracción como en la magia. Atraer la atención en aquello que se ve, que reconoces. En tanto lo ves, lo buscas en tu memoria como próximo y propio. Mientras, el mago realiza la acción en lo que no has de ver. Ahí está el truco, en la sorpresa. El mago es mejor cuanto más incomprensible es el resultado para el espectador. En una semana como esta también hay tiempo para la música. Mientras el cantante hacía una referencia a García Lorca con gran reconocimiento entre el público, la persona que está a mi lado comenta: “Que guay, la verdad es que nunca he leído nada de Lorca me gustaría leer algo”. Se queja también del retraso en las oposiciones, dice ser egresada universitaria en humanidades. Revela que ella debe de estar en el porcentaje de indecisos, porque no sabe si va a votar, “porque no se lo cuentan a través de los medios que ella sigue”. Me hizo pensar en la frivolidad de su actitud y complacencia al no valorar su responsabilidad. Hijas de la democracia que no reconocen avances y obligaciones sociales, los que primero compran los discursos consumistas, pero no participan ni les interesa. “NI-NIs”, personas que ni se informan ni participan sin dejar de renunciar al postureo nihilista que les hace sentirse en la modernidad avanzada. En democracia votar es un derecho y saber lo que votas una obligación. La responsabilidad de informarse y conocer es de la persona. Quien se presenta poner a disposición la información. El Estado ha de garantizar medios para verificar y discriminar tu decisión. Esto es solo una observación fruto de la infelicidad del aburrimiento, con seguridad usted no se encuentra en este caso. Por eso siga las consignas, disfrute, sea víctima del furor de los excesos, de los lenguajes y discursos para ver quien dice la irracionalidad mayor. Realícese “selfis” con la propuesta política que tenga el garrote más grande como en el “Duelo a garrotazos”, obra de Goya que describe la verdadera idiosincrasia española que nadie quiere reconocer, si imponer, vencer no cooperar. Disfrute con pasión en esta semana de “Pasión”. Por favor, no piense, no contraste información, no hasta el sábado. Si es mucho esfuerzo pensar, no se preocupe, deseamos su felicidad. Para ello compre o asuma lo primero que le llame la atención, es la pasión del deseo. Recuerde que esta es una emoción intensa que le impulsa a tener un entusiasmo por desear algo sin sopesar sus efectos. Cuando despierte el lunes, tras tanta pasión sin razón, no siempre tendrá un fármaco para asumir las consecuencias de la jaqueca que le generó su acción.