Para aclararnos
Cuando la política toca la pasta y los intereses, no nos aclaramos mucho. Por un lado, nos parece fatal que suban el IVA de los precios de los alimentos; argumentos hay para dar y tomar. Nos acordamos de los sueldos escasos y de lo que cuesta la cesta de la compra. Pedimos al gobierno de la nación que intervenga en los precios. Por otro lado, ponemos el grito en el cielo si el gobierno de la nación, ese al que pedimos que intervenga, lo hace controlando los precios de la vivienda. El PP se niega a aceptar el concepto de zona tensionada, pues supondría que el gobierno pueda intervenir los precios. ¿En qué quedamos? ¿El gobierno interviene o no interviene? ¿Liberalizamos los precios y dejamos que sea el mercado quien los regule o, por el contrario, exigimos una intervención y control? Lo pregunto para aclararnos. Porque parece que esto es: lo que a mí me interesa, déjese libre al mercado; lo que no me interesa, intervéngase. A esto se añade que la vivienda es un derecho que está en la Constitución, junto con otros. La pregunta es, ¿debe dejarse al mercado los derechos constitucionales, tales como la vivienda, la educación y la salud? Los políticos deberían aclararse primero y así los demás lo tendríamos claro también.