No es un máster,
pero casi

02 nov 2018 / 11:01 H.

El fraude de los cursos de formación se está investigando desde el año 2007, aproximadamente. ¿Y antes de ese año? Porque yo tengo por ahí, en alguna montaña de papeles extraviados, un título de informática de un curso que nunca realicé allá por el año 2000. Me lo vendieron como algo muy positivo para mi formación, estaba destinado a trabajadores y subvencionado por la Junta. Se adaptarían a mis horarios de trabajo, me daban todas las facilidades del mundo y me gustó la idea de seguir formándome a pesar de estar trabajando. Les di mis datos, mi DNI, les firmé mi inscripción y se despidieron diciendo que ya me avisarían de cuándo y dónde se impartiría el curso en cuestión. Cuando unos meses después vuelven a mi trabajo con “mi” maletín, el material que se supone iba a usar en el curso, unos bolis de regalo, una libreta impoluta y un pedazo de título diciendo que había realizado con éxito un curso de informática, me quedé a cuadros. ¿Qué se supone que querían que hiciera con el título? Si no hubiese sido un papel tan grueso, lo tendría claro. O también, presentarlo si me decido a echar la bolsa. Porque da puntos. Y ya sabemos que sin puntos y sin cursos... Cuánto genio suelto. Y todos en la administración.