Necesario y barato

29 may 2016 / 11:16 H.

El Partido Popular se niega a un debate cara a cara con el PSOE. Dice que un debate a cuatro representa mejor la pluralidad actual y que ahora mismo no se sabe quién es el segundo partido político, al aludir a encuestas que sitúan a Unidos Podemos detrás del PP. Se olvida el PP que siempre ha mantenido lo contrario, que lo lógico era el debate a dos entre el partido del Gobierno y el líder de la oposición. Y se olvida el PP de que un cara a cara con Sánchez no excluye otros cara a cara o un debate a cuatro y que esta campaña, de manera especial, debería ser más de debates para acercar lo máximo posible la campaña al ciudadano. Lo que hace falta ahora es que los líderes confronten. Además, se ahorrarían costes, que al final pagamos todos, y que ahora se van a duplicar gracias a su ineficacia para ni siquiera llegar a un acuerdo sobre el recorte en los gastos electorales. Por poca audiencia que tengan, será más que los actos que programan los partidos o las informaciones sobre esos actos. En cualquier caso, caras a cara sí aunque a Rajoy le cansen mucho, como ya dijo. Quizá ese sea, al final, la verdadera razón de que el PP apenas ponga a su candidato a debatir, que los debates le resultan muy trabajosos.