Navidades reducidas

Pensar en los que están en peores condiciones de salud y consumo que nosotros es una premisa que deberíamos tener en cuenta. Este año de pandemia en el que no deberíamos celebrar estas fiestas, vamos a dejarlo para cuando vengan tiempos mejores. A pesar de las quejas sobre la crisis, mucha población está acostumbrada a un ritmo de vida que ahora es imposible de mantener. Además de protegernos de covid, también deberíamos ser mas solidarios con los que menos tienen. Vivir el día a día y no pensar en ese pasado de abundancia, ni en un futuro que no sabemos que nos depara. Si será mejor o no. Cenemos la Nochebuena con precaución y guardar las normas para que podamos salir de esta noche en armonía y con menos presión sobre la salud, que es lo más importante. Todo esto pasará, seremos más humanos y más solidarios en el futuro espero que todo lo que esto sea para bien en mundo cambiante, que nos ha sorprendido, pero nada dura una eternidad. Saldremos de esta, aunque sea con esfuerzo y dejando muchas costumbres, para cambiar por otras mas sencillas y menos consumista. Vamos a ser más optimistas y tener menos miedo al futuro que ojalá sea más llevadero, acostumbrarnos otra vez a los besos y abrazos de los cuales estamos faltos.