Más de lo mismo

17 jul 2018 / 08:14 H.

Digo yo, ¿qué habremos hecho para merecer esto? Estamos sufriendo unas interminables plagas —se va una y viene otra— de políticos que están arrasando, no ya con el bienestar de millones de ciudadanos, sino con todas las normas más elementales de una convivencia medianamente aceptable. Se supone que son personas con estudios —aunque algunas de ellas no hayan pisado por la Universidad—, preparadas, con experiencia, con ideas, con ganas de trabajar con rectitud para conseguir que el país sea un lugar donde se pueda vivir con dignidad. Nada, lo que vemos de la mayoría de ellos está muy distante de esta realidad. El Partido Popular no acertó, y ahora trata de reorganizarse, renovar personas e ideas, y ahí andan en la disputa del mando del partido que protagonizan Soraya Sáenz y Pablo Casado. Una que refleja la continuidad de lo mismo y otro que pudiera aportar aire fresco y tal vez más sano y reconstituyente.

Pero la savia añeja del partido no está por la labor. Y, de momento, Celia Villalobos, que destacó por la extemporaneidad de sus opiniones, ya sumó otra sentencia lamentable a las que dio hace pocos meses refiriéndose a los jubilados. Dijo que Pablo Casado es aún muy joven, que debe esperar y madurar. ¿Es que ella ha mejorado algo intelectualmente con los años? Doña Celia debe meditar y no esperar a cumplir su sueño de jubilarse a los 80 años. Ya es hora de una renovación profunda en el PP y en la política en general. Porque con las mismas grandes ideas que tiene Celia Villalobos para salvar a España, hay gentes también, en todas las formaciones políticas, incluso en el PSOE. La ocurrencia de la ministra Carmen Calvo de pedir a la Real Academia Española de la Lengua cambiar “de pe a pa” la Constitución para adaptarla en sus términos y definiciones a “los machos y a las hembras” es como para salir corriendo y pedir asilo político en el país más lejano y olvidado.

¿No hay problemas más graves, importantes y urgentes en España que esta gilipuertez propuesta por la ministra? Carmen Calvo sabe que la RAE anda también un poco ida en los últimos tiempos y se quiere aprovechar. Pero dentro de la RAE existen académicos consecuentes y Arturo Pérez-Reverte ya anunció que abandonará la academia si se hace caso a la ministra. Los tiempos pasan y los gobiernos cambian, pero en este país siempre tenemos más de lo mismo.