María, de la resistencia
M aría Chapelle murió con 92 años. Era comandante de la Orden de la Legión de Honor francesa. Ya apenas veía ni oía, aunque la memoria seguía intacta. “Soy española pero lo hice por Francia... aún tengo coraje, lo haría de nuevo sin dudar”. María Antonia Benítez Luque nació en 1921 en La Carolina. Estudió hasta los 12 años y, niña aún, fue niñera en Madrid. Y le estalló la guerra. Entonces conoce a un voluntario francés, René Chapelle. Se casaron en 1938 en un pueblo de Toledo. Un año más tarde marchan a Ponts-et-Marais, al norte de Francia, de donde era René. Poco tiempo tienen de felicidad. No permanecieron impasibles frente a la Alemania invasora. Se unen a la Resistencia. Él será Pepe. Ella, Teresa Cardona, oficial de enlace. Participan en misiones de inteligencia y también de acción. Una delación los lleva a los campos de concentración. María pasa por Buchenwald, Ravensbrück, Auschwitz y Leipzig. “Nunca perdonaré. Sufrí humillaciones, torturas y privaciones”. El 25 de mayo de 1945 llega la liberación. Cuando volvió a Ponts-et-Marais, René ya la esperaba. Una de las calles de ese pueblo normando lleva el nombre de la pareja de resistentes.