Madre Tierra

Una frase: “Hijos de la tierra fuimos, /siempre con la tierra acuestas,/ los que en la tierra nacimos/ para morir en la tierra”. Existe mucha propaganda por conservar intacta la naturaleza, por preservar el planeta... Muy poca por animar a labrar la tierra y obtener de ella los alimentos cotidianos necesarios. ¿Quién opta hoy por vivir en el medio rural? Nos han construido un mundo de “inteligencia artificial” donde el trabajo manual tradicional está marginado y despreciado. Crecen las ciudades. Emigra el campo. Antiguamente se vivía sin problemas en pueblos y cortijos con una economía familiar de subsistencia, en simbiosis con animales y naturaleza. Hoy cada día somos más esclavos de las nuevas tecnologías, de las modas urbanas, de las subvenciones políticas, de los controles ideológicos... Hoy falta gente para realizar los trabajos más duros de las labores agrícolas. Lo saben los olivareros de los pueblos y las aldeas de Jaén que recurren a la inmigración para la recolección de la aceituna. Hoy se queja la Madre Tierra de olvido y de abandono. Y sueña con los “viejos campesinos honrados, los que lograban sus frutos con el sudor de sus manos”.